Ales rebuznó:
Bueno, ya llevamos unos días juntos. ¿Me odiáis mucho ya? ¿Tenéis ya ideas para alegrar esto? ¿Mucho candado? ¿Poco? ¿Mucho baneo? ¿Poco? Venga señores, que tenemos que empezar a poner esto en marcha, que no me quiero ir de aquí dejándolo como estaba cuando llegue.
¿Me odiáis mucho ya?
Nadie te odia, este es un foro de amor, de fraternidad, de entrañable y posiblemene homosexualoide compañerismo. Todo es paz, encuentro, hombros amables donde recuperarse de la fatiga y desaliento. En el único habitat donde los chupis y sentimentaloides como yo podemos subsistir sin que nos calienten demasiado el morro. No temas, estas en territorio amigo, no debes preocuparte por vigilar tu espalda.
¿Tenéis ya ideas para alegrar esto?
Yo soy un ladrillero impío e inexorable. La amenidad y lo festivo no va conmigo, me puede mi querencia hacia lo dramático, la teatralidad y sentimentalismo de patio de vecinos. No soy divertido, soy denso e incomodo como una plasta en los calzoncillos. Lo único que escapa de mi tendencia a la tragedia y la cursilada, y que ha dado para unos buenos loles, seria rescatar el hilo que abri sobre las citas locas. Dio unos cuantos momentos para santificar al LOL.
¿Mucho candado? ¿Poco?
Soy un puto merengue con patas, por madridista y por blando. Tengo menos carácter que un postre de gelatina de fresa. Salvo actos de lesa humanidad, ofensas al Rey o a Raul Gonzalez Blanco, no soy partidario de los candados. Me parece más compatible con la anarquía reinante aplicar el liberarismo foril, que sea la propia apatia de los foreros los que condenen al exilio a los hilos prescindibles, tal y como ocurre con los que yo abro, que no necesitan de candado alguno para hundirse en las profundidades del olvido.
¿Mucho baneo? ¿Poco?
El baneo es un acto más de
potestas que de
autoritas, más de
facto que
iure, es una prerrogativa de los
primus inter pares del Foro. Quedan validados como manifestación de su voluntad de ejecutarlos, sin que precisen un soporte legal o normativo para adecuarlos a lo razonable o justificado. Como acto personalisimo e intrasferible, tan sólo el que dicta el acto, como organo superior de si mismo, esta capacitado para autorecusarse. El único juez en estos casos es la conciencia del baneador, sin que sea posible someter a referendum la adopción de medidas de gracia o sancionadoras.