FlorianSotoPeña
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Llevan como dos décadas y medio vendiéndonos la moto de que la invasión moronegra iba a "salvar" a Europa de un desastre demográfico provocado e inducido deliberadamente por ellos mismos, por los castuzos de la propia mierdocracia liberal europea. Lo de "pagar las pensiones" no puede sostenerlo más que un anacéfalo con el cabezón lleno de mierda kalerguista, cuando es evidente que vienen a ser mantenidos con paguitas, tanto aquí como en Francia y otros Estados fallidos europeos (Réduire le coût net de l'immigration : 7 milliards d'euros d'économies annuelles - OID).
Los datos filtrados por el Tribunal de cuentas francés (Cour des Comptes) (Immigration : un coût de 6,57 milliards d'euros en 2019 selon la Cour des comptes) revelan lo que todos sabemos, que los moroniggas generan más gasto público que ingresos. Un informe de 2020 ya señalaba que las ayudas en concepto de subsidios, sanidad y vivienda que perciben superan ampliamente las contribuciones fiscales que aportan. Y en España, y en cualquier país de la Europa occidental sometido a la imposición del estercolero multicultural, las cotizaciones a la seguridad social son bajas y de personal poco cualificado, sin hablar de las paguitas que ocultan los organismos oficiales (Sólo uno de cada cuatro inmigrantes cotiza a la Seguridad Social) o las altas tasas de paro existentes entre estos individuos.
Y el otro argumento, el de "rejuvenecer a la población europea", que en realidad es un eufemismo de reemplazar a la población europea por un popurrí de razas y gentes tercermundistas, más fácilmente manejables para el capital transnacional, usurero y plutocrático, es otra farsa insostenible. Aparte de las implicaciones destructivas en términos de identidad de los pueblos y homogeneidad étnica, el resultado de importar invasores ha sido falta de integración, fracaso escolar, delincuencia y paro estructural. Y ya tienes distritos de la capital, de París, como Saint-Denis, donde hay un 70% de no europeos entre la población joven. Un puto desastre. Eso por no hablar del gasto social, del colapso sanitario, o barriadas enteras de Cataluña, donde ningún extranjero trabaja y son receptores de paguitas, como pasa con Vic, Hospitalet y Vic.
Al mismo tiempo hay que advertir otro fenómeno, y es que Europa se está desindustrializando, aquejada por una crisis (inducida, véase Agenda 2030), y perdiendo los ejes de su economía productiva y abocando a sus propios nacionales a la miseria, a una inflación galopante y a ser receptores de paguitas miserables previo a su liquidación y sustitución por moroniggerspanchitos etc.
Se trata de ingeniería demográfica, pura y dura, y se trata de disolver la identidad cultural, racial y civilizacional de los pueblos de Europa, en la que eso que ellos (los castuzos) llaman "inmigración" es un arma ideológica para disolver las identidades nacionales, y sustituir a los pueblos originarios europeos por poblaciones fragmentadas y gestionables. Y todo esto no lo están haciendo los "comunistas", que al fin y al cabo son liberales de izquierdas, sino el propio liberalismo, cuyas bases antropológicas son esas, las de considerar al hombre como mercancía intercambiable al margen de las raíces y de la identidad forjada en el seno de un pueblo, de una cultura, una raza y una civilización concretas. Al liberal no le importa nada de eso, creen que las personas son intercambiables, que puedes meter 60 millones de africanos o panchitos en Europa y reducirlo todo a un cálculo económico, les da igual desfigurar o destruir las raíces etnoculturales de los pueblos, los liberales son basura. De hecho, la democracia liberal está destruyendo Europa, no solo España, estamos siendo testigos de ello. Esa es la realidad.
Los datos filtrados por el Tribunal de cuentas francés (Cour des Comptes) (Immigration : un coût de 6,57 milliards d'euros en 2019 selon la Cour des comptes) revelan lo que todos sabemos, que los moroniggas generan más gasto público que ingresos. Un informe de 2020 ya señalaba que las ayudas en concepto de subsidios, sanidad y vivienda que perciben superan ampliamente las contribuciones fiscales que aportan. Y en España, y en cualquier país de la Europa occidental sometido a la imposición del estercolero multicultural, las cotizaciones a la seguridad social son bajas y de personal poco cualificado, sin hablar de las paguitas que ocultan los organismos oficiales (Sólo uno de cada cuatro inmigrantes cotiza a la Seguridad Social) o las altas tasas de paro existentes entre estos individuos.
Y el otro argumento, el de "rejuvenecer a la población europea", que en realidad es un eufemismo de reemplazar a la población europea por un popurrí de razas y gentes tercermundistas, más fácilmente manejables para el capital transnacional, usurero y plutocrático, es otra farsa insostenible. Aparte de las implicaciones destructivas en términos de identidad de los pueblos y homogeneidad étnica, el resultado de importar invasores ha sido falta de integración, fracaso escolar, delincuencia y paro estructural. Y ya tienes distritos de la capital, de París, como Saint-Denis, donde hay un 70% de no europeos entre la población joven. Un puto desastre. Eso por no hablar del gasto social, del colapso sanitario, o barriadas enteras de Cataluña, donde ningún extranjero trabaja y son receptores de paguitas, como pasa con Vic, Hospitalet y Vic.
Al mismo tiempo hay que advertir otro fenómeno, y es que Europa se está desindustrializando, aquejada por una crisis (inducida, véase Agenda 2030), y perdiendo los ejes de su economía productiva y abocando a sus propios nacionales a la miseria, a una inflación galopante y a ser receptores de paguitas miserables previo a su liquidación y sustitución por moroniggerspanchitos etc.
Se trata de ingeniería demográfica, pura y dura, y se trata de disolver la identidad cultural, racial y civilizacional de los pueblos de Europa, en la que eso que ellos (los castuzos) llaman "inmigración" es un arma ideológica para disolver las identidades nacionales, y sustituir a los pueblos originarios europeos por poblaciones fragmentadas y gestionables. Y todo esto no lo están haciendo los "comunistas", que al fin y al cabo son liberales de izquierdas, sino el propio liberalismo, cuyas bases antropológicas son esas, las de considerar al hombre como mercancía intercambiable al margen de las raíces y de la identidad forjada en el seno de un pueblo, de una cultura, una raza y una civilización concretas. Al liberal no le importa nada de eso, creen que las personas son intercambiables, que puedes meter 60 millones de africanos o panchitos en Europa y reducirlo todo a un cálculo económico, les da igual desfigurar o destruir las raíces etnoculturales de los pueblos, los liberales son basura. De hecho, la democracia liberal está destruyendo Europa, no solo España, estamos siendo testigos de ello. Esa es la realidad.