La madre que los parió, y todavía les parece poco lo que reciben. Parece que les hubiese hecho la boca un monje, piden y piden sin límite. Es que es acojonante que vivan como reyes por haber estudiao una puta carrera y luego haber aprobado una oposición, como si eso fuese suficiente mérito como para estar el resto de sus vidas chupando del frasco y trabajando lo justo. Teníais que cobran según producción, eficacia, rendimiento, rentabilidad.
Como el puto policía que una vez superadas las pruebas físicas engorda como un ceporro, igual los putos médicos que una vez aposentados se acabó el seguir formándose. Que se muere un paciente, ah, se siente, ya estaba enfermo, no se podía hacer nada.
A los bomberos, policías y médicos les pondría yo una prueba anual, el que no la pasase a la puta calle. Se acabarían los bomberos fofos, los policías tripudos y los médicos anclados en la medicina de los 80.
Pues si viese a la panda de Charos y a la segurata a la puerta del INEM Provincial de aquí, se echaría a llorar. Raro es el día que no estén haciendo la del cigarrito el sol entre tremendas risotadas. Y la segurata, más que inspirar seguridad, inspira ganas de que te cocine unas lentejas con arroz.
Dicho esto, si hay algunos a los que respeto es a los médicos. Por lo menos, los que me han tocado a mí siempre unos putos y putas cracks, incluidas rumanas y panchitas. Lo único que no me pudieron curar entre todos fue un dolor de garganta de 11 meses. Aunque creo que gran parte de la culpa la tiene servidor. Excesos y estrés...
He tenido muchísima suerte porque hay gente que dice que hay bastante soberbio con bata suelto por ahí.
Y ya sabe, por lo que le cuestan unas putillas, se puede apuntar para alguna academia para que le guíen en una oposición a conserje o bedel*. Todo el día rodeado de niñas en flor, tocándose las pelotas, y 1200 para empezar a hablar.
Aunque sé lo que me va a contestar, que está mal nutrido y que tiene que pelear por la vida y que tal Pascual. Pues nada, a disfrutar los 30 o 40 años que le quedan masticando el polvo del camino. Sin saber lo que es la intimidad de una casa para uno solo, tener una puta pata de jamón en propiedad y un cuchillo, buen vino, un coche en el que no te achicharres en verano, y en el que maldigas tu estampa en una gélida mañana de invierno, y sobre todo, no estar condenado a 40 años viviendo al límite, caso de no acabar debajo del puente o saliendo en la reedición de Callejeros.
Vale, ya sé lo que me va a decir. Que usted tiene gustos espartanos, que no necesita nada, porque todo lo lleva consigo; que no necesita jamón, ni vino, ni coche, ni buen sofá para echarse la siesta ni intimidad para hacerse las pajillas. Pues vale. Se lo compro. Pero a 1 céntimo.
A seguir lloriqueando y a seguir autoengañándose el resto de sus días viendo desfilar a los demás camino de la playa, de vuelta de llenar el carrito de la compra hasta arriba, de traerse a una marrana al piso de vividor follador, y todas esas cosas que alguien con un mínimo de ambición trata de conseguir a dentelladas. Lo mejor que le puede pasar es estamparse contra un pilar en la carretera. Cuanto más rápido indoloro, mejor.
Parece ser que se regodea con gusto en la mierdecilla y en que le hagan un poquito de caso en este foro, sea para insultarle o para soltarle de vez en cuando: ¡Joder Verruga, qué pico tienes!
Ya que no vive, deje vivir.
Hijo de puta.
*Not El bedel related.