Si llegase mi hija diciendo que se ha metido a puta, le cruzo la cara con dos bofetones y no dormiría en toda la noche. ¿ Y por qué, y por qué? cojones, pues no lo puedo explicar, pero me sentaría mal, muy mal, y no por eso soy hipócrita, sino porque lo de las putas es así, igual que la mayoría de los vicios, necesitan clandestinidad para ser vicios, la hay con todo, con la droga, con el sexo, con las infidelidades, pero estamos amoldados a los esquemas en los que nadie habla claro.