Estoy con Tom, la ley d'Hont no perjudicar a nadie a priori, todo depende del pico de votos que te haya sobrado sin que hayas obtenido escaño. De hecho, lo mismo puede ocurrir en el reparto proporcional (que el reparto acabe no siendo proporcional) por culpa de los decimales.
Supongamos 100 votos y Hay para repartir 5 escaños. Los resultados son:
A: 46 votos. = 46% => 0,46*5 = 2,3 escaños.
B: 44 votos. = 44% => 0,44*5 = 2,2 escaños.
C: 10 votos. = 10% => 0,10*5 = 0,5 escaños.
Hasta aquí todo es proporcional, el problema es que no hay modo humano de partir un parlamentario en trocitos y repartirlo entre tres partidos diferentes. Así que hay que redondear y queda:
A = 2 escaños.
B = 2 escaños.
C = 1 escaño.
Con lo cual se pierde la proporcionalidad. Y observa que A solo tiene el doble de escaños que C a pesar de casi quintuplicar su número de votos.
El perjuicio a los partidos minoritarios se debe a:
* No hay circunscripción única, así que si todos los votos que en una circunscripción no te han bastado para conseguir escaño no te valen para nada. No obstante, esto también podría sucederle a un partido muy votado si en todas las circunscripciones le ocurre que se queda a muy poco de obtener el siguiente escaño. En realidad, las circunscripciones no perjudican a partidos minoritarios, sino a partidos que tienen su voto poco concentrado.
* En la ley electoral española, hay un mínimo por debajo del cual el partido no participa en el reparto de escaños. Este minimo es el 5% o el 3% dependiendo deñ tipo de elección. En este caso, sí hay perjucio, porque hay que tener en cuenta que si en una circunscripción se reparten más de 20 escaños, si se tiene menos de un 5% sí podría tocar un escaño, pero al ser excluido del reparto, no. En cualquier caso, este mínimo podría ser aplicado tanto un reparto proporcional como a un reparto hecho con ley d'Hont.