A_Starkiller
Aborto de Forero
- Registro
- 13 Oct 2008
- Mensajes
- 3
- Reacciones
- 0
Me considero un putero exigente y he visitado clubes y pisos por toda la geografía española, europea, americana y africana (bueno, en los lugares en los que he estado en estas última áreas, cualquier pub o similar es un puticlub, y cualquier moza con la que te cruces se va a ir contigo a hacer lo que quieras por cuatro duros; y lo digo sin acritud, sino con cariño, respeto y nostalgia). El caso es que por los madriles, últimamente me he llevado varias decepciones seguidas, con servicios con poca implicación, tipo aquí te pillo, aquí te mato. Si después de correrme, siento una punzada de arrepentimiento, es que no ha estado bien.
Sin embargo, acabo de descubrir hace unas semanas un pequeño tesoro.
Yo trabajo ahora por Goya / Velázquez y he estado buscando anuncios por la zona que me levantasen la libido (no es difícil). Tras algunos experimentos fallidos, encontré un anuncio de un piso con varias chicas de diversas nacionalidades (incluida alguna española), aparentemente jóvenes, con precios económicos por la crisis. Llegué a ver alguna vez hasta 30 euros por 15 minutos. Ahora están a 40 euros los 15 minutos, 50 la media hora repitiendo (si quieres), 60 por dúplex media hora, y de ahí para arriba. Tras muchas semanas con intención de probar, pero sin oportunidad (que conste que sólo frecuento a las obreras del amor un puñado de veces al año y, generalmente, por temporadas), finalmente las llamé hace unas semanas y me pasé por su piso a la hora de comer (escapada del curre, que por algo soy medio jefe).
Me abrió una española muy jovencita, vestida muy casual, y me dijo que en ese momento sólo estaba ella y una francesa (creo) muy sexy, llamada Alizee. Es rubia, delgadita y buen cuerpo, aunque con las tetas un poco flojas. La rubia me puso a cien y la elegí para media horita. Curiosamente, no me llevó a lavar (aunque yo simpre voy bien limpito), sino que me limpió con una toallita húmeda. No es un punto a favor, pero tampoco me resulta demasiado molesto. Debo decir que no me suele interesar mucho el folleteo y prefiero el francés natural hasta el final, que es lo que no consigo fáclmente en mi vida cotidiana. Así que, generalmente, tras un rato de penetraciones, pido que me rematen con la boquita a pelo. Sin embargo, cuando la tenía montada encima, me empezó a rozar los labios con los suyos y con su lengua, y descubrí lo cachondo que me pone que la lumi me bese con lengua durante el sexo. Me corrí con un gusto tremendo y salí bastante satisfecho.
Repetí la semana siguiente. Había más chicas. No estaba la española que me abrió el primer día, pero había otra, llamada Gema. Sí estaba Alizee, que fue la que me recibió y me saludó cariñosamente al reconocerme. Además, había otra chica o dos sudamericanas. Cuando me pregntó Alizee que cuál me gustaba más, le respondí que ella, pero como quería experimentar, elegía a Gema. Es morena, voluptuosa (en la foto parece un poco gorda, pero desnuda tiene un cuerpo escultural) y muy simpática. Ella sí que me llevó a lavar, aunque me hizo lavarme yo mismo. No me dejó chuparle su sexo (cosa que me encanta como prolegómeno) porque decía que lo tenía un poco irritado, pero me hizo una limpieza de sable muy viciosa. Otra vez folleteo con besos con lengua y otra vez que no llegué al francés final. Además, la moza me dijo en varias ocasiones que la ponía muy cachonda, que la sentía muy dura al penetrarla y que las debía tener a las chicas locas. Sí, ya sé que eso se lo dicen a todos, pero no todas lo dicen y pocas resultan tan convincentes (húmeda sí que estaba un rato). Al final, hasta terminamos hablando un poco de política. Salí aún más satisfecho que con Alizee (que ya es).
En mi tercera visita, volví a ver a Alizee y a otras chicas distintas (rotan bastante) y esta vez me quedé con una venelozana llamada Lorena. Para mí, el mejor cuerpazo de las tres, piel morena muy suave, pechos pequeños pero bien puestos, delgada, pero con las curvas adecuadas. Muy agradable y también con besos con lengua (aunque al principio no, porque creía que yo no querría). En esta ocasión, me propuse acabar con francés natural, pero me dijo que no me corriera en la boca. Entonces, cambié de opinión y decidí que acabara haciéndome una paja suave (no de esas de brazo mecánico) mientras nos morreábamos a gusto. Otro final satisfactorio.
Tres éxitos de tres experiencias. No es caro, está cerca del curre y me dan lo que busco. Volveré siempre que tenga oportunidad (ojo, que tampoco me puedo gastar alegremente 50 euros cada semana).
Me gustaría saber si alguien más conoce este piso (sé que las chicas tambien van a otro en Hermosilla) y qué le parece. Para gustos, los colores.
Salidos, digo, saludos.
Anakin
Sin embargo, acabo de descubrir hace unas semanas un pequeño tesoro.
Yo trabajo ahora por Goya / Velázquez y he estado buscando anuncios por la zona que me levantasen la libido (no es difícil). Tras algunos experimentos fallidos, encontré un anuncio de un piso con varias chicas de diversas nacionalidades (incluida alguna española), aparentemente jóvenes, con precios económicos por la crisis. Llegué a ver alguna vez hasta 30 euros por 15 minutos. Ahora están a 40 euros los 15 minutos, 50 la media hora repitiendo (si quieres), 60 por dúplex media hora, y de ahí para arriba. Tras muchas semanas con intención de probar, pero sin oportunidad (que conste que sólo frecuento a las obreras del amor un puñado de veces al año y, generalmente, por temporadas), finalmente las llamé hace unas semanas y me pasé por su piso a la hora de comer (escapada del curre, que por algo soy medio jefe).
Me abrió una española muy jovencita, vestida muy casual, y me dijo que en ese momento sólo estaba ella y una francesa (creo) muy sexy, llamada Alizee. Es rubia, delgadita y buen cuerpo, aunque con las tetas un poco flojas. La rubia me puso a cien y la elegí para media horita. Curiosamente, no me llevó a lavar (aunque yo simpre voy bien limpito), sino que me limpió con una toallita húmeda. No es un punto a favor, pero tampoco me resulta demasiado molesto. Debo decir que no me suele interesar mucho el folleteo y prefiero el francés natural hasta el final, que es lo que no consigo fáclmente en mi vida cotidiana. Así que, generalmente, tras un rato de penetraciones, pido que me rematen con la boquita a pelo. Sin embargo, cuando la tenía montada encima, me empezó a rozar los labios con los suyos y con su lengua, y descubrí lo cachondo que me pone que la lumi me bese con lengua durante el sexo. Me corrí con un gusto tremendo y salí bastante satisfecho.
Repetí la semana siguiente. Había más chicas. No estaba la española que me abrió el primer día, pero había otra, llamada Gema. Sí estaba Alizee, que fue la que me recibió y me saludó cariñosamente al reconocerme. Además, había otra chica o dos sudamericanas. Cuando me pregntó Alizee que cuál me gustaba más, le respondí que ella, pero como quería experimentar, elegía a Gema. Es morena, voluptuosa (en la foto parece un poco gorda, pero desnuda tiene un cuerpo escultural) y muy simpática. Ella sí que me llevó a lavar, aunque me hizo lavarme yo mismo. No me dejó chuparle su sexo (cosa que me encanta como prolegómeno) porque decía que lo tenía un poco irritado, pero me hizo una limpieza de sable muy viciosa. Otra vez folleteo con besos con lengua y otra vez que no llegué al francés final. Además, la moza me dijo en varias ocasiones que la ponía muy cachonda, que la sentía muy dura al penetrarla y que las debía tener a las chicas locas. Sí, ya sé que eso se lo dicen a todos, pero no todas lo dicen y pocas resultan tan convincentes (húmeda sí que estaba un rato). Al final, hasta terminamos hablando un poco de política. Salí aún más satisfecho que con Alizee (que ya es).
En mi tercera visita, volví a ver a Alizee y a otras chicas distintas (rotan bastante) y esta vez me quedé con una venelozana llamada Lorena. Para mí, el mejor cuerpazo de las tres, piel morena muy suave, pechos pequeños pero bien puestos, delgada, pero con las curvas adecuadas. Muy agradable y también con besos con lengua (aunque al principio no, porque creía que yo no querría). En esta ocasión, me propuse acabar con francés natural, pero me dijo que no me corriera en la boca. Entonces, cambié de opinión y decidí que acabara haciéndome una paja suave (no de esas de brazo mecánico) mientras nos morreábamos a gusto. Otro final satisfactorio.
Tres éxitos de tres experiencias. No es caro, está cerca del curre y me dan lo que busco. Volveré siempre que tenga oportunidad (ojo, que tampoco me puedo gastar alegremente 50 euros cada semana).
Me gustaría saber si alguien más conoce este piso (sé que las chicas tambien van a otro en Hermosilla) y qué le parece. Para gustos, los colores.
Salidos, digo, saludos.
Anakin
Novato de mierda
