Elena en el País de los horrores, un clásico y diría que de los pioneros. Llevan la tira de años, 13 o 14. Los primeros años se notan la inexperiencia y el bajo presupuesto, con secciones bastante chorras y prescindibles, pero había una muy entretenida en la que actores semiprofesionales ponían voz a criminales y relataban la transcripción de una confesión, una carta o interrogatorio del mencionado criminal. Durante un tiempo también estuvo colaborando Juan Ignacio Blanco, quien se encargaba de analizar desde el punto de vista criminalístico algún asesino famoso, ya fuera español o extranjero, y la verdad que también era interesantísimo, ya que no había fumadas conspiranoicas. Actualmente son más programas monográficos que otra cosa, sobre crímenes, sucesos, juicios, etc.
Negra y Criminal era otro que me tenía enganchado, aunque duró poco, dos temporadas. Ficciones y crímenes reales relatados por actores; los crímenes reales, de hecho, ponían los pelos de punta.