Acabo de venir de comprar unas cosas en un pequeño supermercado y había 4 tíos, no 4 charos ojo, indignadísimos discutiendo entre ellos y dándose la razón por la no dimisión del calvo subnormal en el sentido de que no se creían que al final no haya dimitido y diciéndole de todo. Esto demuestra, a pesar de la imbecilidad de Rubiales, cómo calan los medios de comunicación a través de sus mensajes sesgados y cómo la población, en general, traga con lo que le dictan sin dar opción a dudar y ni mucho menos a discrepar.