Agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local detuvieron en la madrugada de ayer a un hombre de 29 años que poco antes había violado a una mujer en una estación de metro de Valencia. La víctima, de 60 años, tuvo que ser evacuada en una ambulancia a un hospital de Valencia por las lesiones sufridas durante la agresión sexual y las heridas que le causó al golpearla para vencer su resistencia. El arrestado no tiene antecedentes, al parecer, aunque la Policía Nacional está investigando si puede haber cometido más agresiones sexuales.
Los hechos sucedieron a última hora de la noche del miércoles, cuando la víctima tomó un metro para regresar a su domicilio. En el vagón solo viajaban ella y un desconocido, sentado en el extremo opuesto, y que la acechó durante buena parte del trayecto.
Cuando la mujer llegó a su parada, que Levante-EMV no revela para preservar por completo la identidad de la víctima, salió del vagón y apretó el paso. El desconocido comenzó a perseguirla mientras le dirigía frases que no pudo entender. La mujer logró rebasar las puertas de seguridad, pero cuando estaba subiendo las escaleras hacia la calle, fue alcanzada por el hombre, que la emprendió a golpes y puñetazos con ella. Luego, la arrastró escaleras abajo y la forzó en un rincón tras arrancarle la ropa.
Por fortuna y pese a la hora, cerca de la medianoche, sus gritos alertaron a los vecinos, que llamaron al 112, lo que propició que varias patrullas policiales acudieran de inmediato. De hecho, se toparon con el presunto violador saliendo de la boca de metro. Al verse acorralado, comenzó una alocada huida. Varias unidades policiales le persiguieron a pie y en coche, aunque finalmente lograron darle alcance y acorralarlo.
Al verse de nuevo rodeado, trató de enfrentarse a los primeros agentes de la Policía Local que llegaron, por lo que uno de ellos se vio obligado a disparar con su pistola eléctrica al sospechoso. Finalmente, pudo ser reducido y esposado, tras lo cual fue llevado al Hospital General de Valencia. A continuación, regresó a los calabozos policiales y aún está pendiente de ser entregado al juez.
La víctima, por su parte, fue trasladada en una ambulancia a un hospital de Valencia, donde le curaron las lesiones en la cara y otras partes del cuerpo provocadas con los puñetazos, así como las propias de la violación. La Policía Nacional trata ahora de averiguar si el detenido está implicado en más violaciones.