Amigo, que no son españolas. Hay sitios, aunque os cueste creerlo, donde no se les reprocha a las mujeres lo que hacen o dejan de hacer. Y donde esas mujeres no tienen en cuenta lo que puedan pensar o decir de ellas.
No se trata de eso. Las mujeres pueden hacer lo que quieran. En España también. No se reprochan entre amigas tener un follamigo. Ese no es el tema, creo que no se ha entendido. La cuestión es traer a un tipo que has metido en tu casa sólo para follar y al que le vas a pegar una patada en breve y mandarlo a su casa (esa es la teoría e impresión que dice tener el protagonista) a una cita donde va tu mejor amiga con su pareja.
Y ahí es donde digo que no encaja y que la amiga podría verla como una zorra. No porque no pueda tener 8 amantes, sino porque es casi imposible que dos amigas queden, una con un pelele que solo le sirve para meterlo en la cama y la otra con el marido.
Es la situación, no lo que cada mujer hace con los hombres. No se va a una boda en pijama. No voy a una reunión de primos y parejas con mi follamiga. Me lo pueden reprochar, puedo quedar mal, está mal visto, el marido de la otra se puede sentir incomodo..., mil cosas. Pero fundamentalmente una: no apetece.
Estás en tu casa con un amigo que sólo quieres para follar (insisto, si seguimos lo que dice él) y no apetece llamar a tu amiga y su pareja para cenar.
Y sobre todo, y algo que aún no ha salido por aquí pero es lo más importante: no apetece al interesado. Es decir: ¿yo soy un follamigo que voy a una casa a lo que voy, y la mujer me dice que me ha preparado un plan con su mejor amiga y su pareja? Y voy? Vamos, salgo de la casa pitando. Es el peor plan que me pueden plantear. ¿Thorndike ha ido a una cita así asumiendo que es sólo un follamigo y temiendo que le puede dar puerta en cualquier momento? Suena todo a increíble. O como mucha gente dice, que no sabe captar las señales y se va dejando llevar. Y que sus impresiones no encajan con los hechos.
Es decir, que las mujeres pueden hacer lo que quieran. Estoy seguro de que, como mejores amigas, la sueca y la otra se cuentan todas sus aventuras y ninguna piensa que la otra es una zorra. La cosa va por los otros dos. Porque la otra opción, ante una cita como la que tuvieron los 4, es pensar que los dos hombres son unos peleles que no pintan nada.
A mí mi pareja me dice que vamos a salir con su amiguita y un fulano que igual en dos semanas ha desaparecido, y le digo que vaya ella sola, que me quedo viendo el futbol. Y yo soy el otro tío, y sospecho que sólo soy un follamigo al que me van a dejar en pocos días y a lo último que voy es a una cita con una pareja formal, amigos de la que me va a dar puerta.
A ver si te crees que si Truño le pregunta a la sueca sobre los condones, sobre a quién se folla o se deja de follar o sobre su actividad de Facebook... no la van a mandar a la mierda automáticamente.
La sueca puede tener 20 amantes. Pero si le plantea a Truño una cita con uno de ellos, espero que diga que no va.