No sé si sabéis que ahí fuera hay personas a las que el peor insulto que le puedes decir es, simple y llanamente, TONTO. Al escuchar esa palabra se sienten profundamente humillados porque efectivamente son tontos y luchan cada día por ocultarlo, pero la realidad golpea duro y parejo. Son tontos, aunque sean buena gente, trabajadores, honrados y se pueda confiar en ellos, son profundamente tontos y de vez en cuando se delatan.
He conocido a dos tontos y estoy seguro de que es algo más común de lo que puede parecer.
¿Conocéis algún tonto? Yo no soy tonto.