Menudo cobarde, a mi nunca me pasaría eso porque si no me dejan entrar en un sitio es porque no merecen mi presencia, así que lo que haría sería dar media vuelta. Pero si tuviese que pegar a un portero nunca utilizaría un vaso y menos aún me iría corriendo, no se porqué la gente tiende a jiñarse de los porteros, sueñen ser gorilones y con los gorilones es fácil, además ser más pequeño que ellos se puede utilizar como ventaja, se trata de pegarles una patada en las piernas, si se hace bien caen al suelo y una vez en tierra hay varias opciones, puñetazo en el cuello o corazón (esto les dejará sin respiración), o bien agarrarles del brazo y rompérselo.
Obviamente para hacer esto hacen falta unos conocimientos de artes marciales o de defensa personal que no todo el mundo tiene. Yo si.