Con semejante historial no sé para qué molestarse en retomar el contacto con un jeta
Sí y no.
Curiosamente, a mi nunca me pidió dinero, e incluso me lo prestó en una ocasión sin obligarme a devolvérselo. Me gustaba porque sabía sacarme los pensamientos sin siquiera decírselo y
además, era un proyecto interesante de hombre:
Sabía francés a nivel nativo y su madre estaba dispuesta a pagarle la carrera de derecho (aunque finalmente se metió en una fp de informática). Medía 1'80, piel color canela y dermis preciosa, rasgos algo aniñados, salvo cuando se dejaba barba, pelazo, tenía un olor muy característico cuando estaba excitado. No fumaba ni bebía.
Era muy dulce y empático en el trato con todos, aunque yo sabía que tenía su lado oscuro/morboso. Pero con 17-20 años, creo que le preocupaban demasido "los demás" y no tanto centrarse en quien lo adoraba como yo (aunque ni de coña pensé que acabaría saliendo con él porque era dos años menor que yo, de hecho, al principio maquiné para usarlo como conejillo de indias, pero vi cosas que no veía en casi nadie más de mi edad y caí).
Creo que ni llegamos a empezar de verdad por miedo suyo. O eso me insinuó: - "Somos unos niños. Yo también tengo mis inseguridades".
Busqué el porqué desde miles de enfoques. Creo que, a lo tonto, estuve como 3 años buscándole muchas veces. Iba yo a su casa, en fin...
El día que me lo encontré por la calle, con la puta dominatrix, me quedé sin saber qué hacer.
Al principio no le reconocí porque era casi de noche y me dolía la cabeza (salí a caminar). A los segundos de pasar a mi lado me percaté que era él........ y le seguí hasta su edificio... fue algo instintivo.
Me giré y su "novia-zorra" con cara de bruja (literal) venía un par de pasos alejada porque iba hablando por el móvil. Ambos entraron al portal con las bolsas de la compra, se reían.
Yo ahí en la cera, quieta, observando anonada.
Finalmente me senté en un banco a pensar pero nada se me venía a la mente, tan sólo que había desaprovechado una ocasión genial para montar el numerito y no lo hice; es que no supe ni reaccionar.