RomeroElMadero
Novato de mierda
- Registro
- 7 Sep 2008
- Mensajes
- 90
- Reacciones
- 0
14 años, me encontraba estudiando en un colegio de monjas y ese año casualmente me toco en la clase de los elegidos, un coctel de niñas pijas pre-lorealistas, downies, seres de luz, repetidores cuya meta era ser albañil y demás chusma. Uno de mis nuevos compañeros era un aprendiz de forero de 16 años, pecoso y cuyo aliento olía a mierda de cinco dias.
El chico tenia un retraso importante y una mezcla de Asperguer y sindrome de Peter Pan, su padre era alcoholico y camionero y le regalaba revistas porno desde que tenia 10 años y su madre, según los rumores que había por el colegio, era puta y sidosa.
Cada dia nos traia a clase una nueva revista, con la que todos fantaseabamos en el recreo, el malote de turno, como era su deber, se la tomaba prestada y la camuflaba entre el libro de la asignatura para posteriormente hacerse un pajote alegremente y sacarse el pito delante de las pijas.
Al chico este le conociamos vulgarmente como "sida", pero cualquier insulto hacía mella en su debilitada personalidad y nos dio inumerables loles a lo largo del curso por salir llorando en mitad de la clase, cagandose en nuestros muertos y en los del profesor, a causa de los insultos que recibía de manera sutil en mitad de cada clase.
El momento épico de éste ser fue en una clase de gimnasia, tocaba practicar salto de altura en una colchoneta que te destrozaba los riñones cada vez que caías y todos los alumnos, algunos mejor que otros, lograbamos saltarlo o en su defecto comernos el listón en el intento. Llega el turno de nuestro amigo "sida" y todos empezamos a jalearle otorgándole un +10 en confianza, realiza una carrera espléndida encarando con gran velocidad la colchoneta, en el último metro antes de intentar el salto su nula confianza en si mismo le impide lograr el impulso y termina su carrera frenando bruscamente con la cabeza contra el poste de hierro que aguantaba el listón. El golpe tiro el poste al suelo ,que pesaba bastante, y abrió una tremenda brecha en la cabeza de nuestro entrañable amigo "sida", como era el subnormal de clase todos rodabamos por el suelo de la risa mientras el se desangraba y chillaba como un cerdo y el profesor se quedaba blanco por el gran momento vivido.
Al final se solucionó con varios puntos de sutura, un mes de ausencia en clase de nuestro compañero y la suspensión del salto de altura en las pruebas físicas de gimnasia. Sin duda eran buenos tiempos
El chico tenia un retraso importante y una mezcla de Asperguer y sindrome de Peter Pan, su padre era alcoholico y camionero y le regalaba revistas porno desde que tenia 10 años y su madre, según los rumores que había por el colegio, era puta y sidosa.
Cada dia nos traia a clase una nueva revista, con la que todos fantaseabamos en el recreo, el malote de turno, como era su deber, se la tomaba prestada y la camuflaba entre el libro de la asignatura para posteriormente hacerse un pajote alegremente y sacarse el pito delante de las pijas.
Al chico este le conociamos vulgarmente como "sida", pero cualquier insulto hacía mella en su debilitada personalidad y nos dio inumerables loles a lo largo del curso por salir llorando en mitad de la clase, cagandose en nuestros muertos y en los del profesor, a causa de los insultos que recibía de manera sutil en mitad de cada clase.
El momento épico de éste ser fue en una clase de gimnasia, tocaba practicar salto de altura en una colchoneta que te destrozaba los riñones cada vez que caías y todos los alumnos, algunos mejor que otros, lograbamos saltarlo o en su defecto comernos el listón en el intento. Llega el turno de nuestro amigo "sida" y todos empezamos a jalearle otorgándole un +10 en confianza, realiza una carrera espléndida encarando con gran velocidad la colchoneta, en el último metro antes de intentar el salto su nula confianza en si mismo le impide lograr el impulso y termina su carrera frenando bruscamente con la cabeza contra el poste de hierro que aguantaba el listón. El golpe tiro el poste al suelo ,que pesaba bastante, y abrió una tremenda brecha en la cabeza de nuestro entrañable amigo "sida", como era el subnormal de clase todos rodabamos por el suelo de la risa mientras el se desangraba y chillaba como un cerdo y el profesor se quedaba blanco por el gran momento vivido.
Al final se solucionó con varios puntos de sutura, un mes de ausencia en clase de nuestro compañero y la suspensión del salto de altura en las pruebas físicas de gimnasia. Sin duda eran buenos tiempos