El que opina que si parece, sabe y alimenta igual, es igual se equivoca.
Yo creo que estamos empezando a violar normas fundamentales, tal y como se hace en la clonación y se está empezando a hacer con la IA, y que pueden deparar un futuro realmente incierto para las nuevas generaciones.
Por mucho que nos empeñemos, no somos dioses y es algo que, por desgracia, hay muchos que no quieren asumir y se empeñan en romper estas normas fundamentales como la creación, la vida o la reproducción. Comer forma parte de la vida y es algo que ha permanecido inalterado durante miles de años.
Llevamos años intentando modificar esta norma introduciendo alimentos modificados genéticamente (transgénicos), fitosanitarios, herbicidas, abonos y cada vez mas mierda para incrementar la producción y que hace que los alimentos estén perdiendo toda su naturalidad y sabor original.
Es posible que un tomate modificado y tratado genéticamente para resistir más tiempo sea, desde el punto de vista económico, mucho mas rentable porque aguanta mas tiempo sin ponerse malo, pero la verdad es que es casi imposible encontrar un tomate que sepa al tomate que comíamos cuando éramos pequeños.
Personalmente creo que gran parte de las enfermedades actuales (sobre todo el cáncer), provienen de estos nuevos cultivos y tratamientos de mierda que solo buscan rentabilidad y no salud.
Leí hace poco un artículo que hablaba sobre la incorporación de insectos a los alimentos en forma de harinas. Los trituraban y sustituían la harina inicial por esta nueva harina hecha de insectos triturados. Algunos investigadores hablaban sobre la alta cantidad de proteínas, ácidos grasos esenciales y micronutrientes de estas harinas de insectos. Además eran baratas, por lo que muchos fabricantes, una vez se aprobó por Sanidad su uso, han empezado a incluirlas en la fabricación de sus productos.
Pero también hay que saber que se han realizado otros estudios, no por investigadores pagados por las empresas fabricantes, sino privados y que demuestran que el consumo de este tipo de harinas tienen efectos nocivos no declarados como pueden ser la presencia de sustancias como la quitina y que impide la digestión y la absorción de las proteínas. También demostraron la presencia de taninos, fitatos y oxalatos que reducen la absorción de otros nutrientes como el calcio, zinc, hierro, magnesio y gran cantidad de proteínas y que ademas, su presencia se asocia a casos de hipoglucemia.
Eso sin contar con las posibles alergias que estos alimentos pueden producir a medio plazo por su ingestión diaria, cosa ya demostrada en algunos estudios universitarios pues contienen sustancias no habituales en nuestra dieta histórica.
Por todo ello, no me parece una alternativa saludable, por mucho que las agendas del NWO quiera imponerla como algo ecofriendly.