El Spectrum ZX de Sinclair. Lo compró mi padre el día que salió al mercado en Londres. El freak de él cogió un avión exclusivamente para esto.
Yo cuando nací ya estaba en casa creo. Posiblemente el primer ordenador de todo Santander. Recuerdo que compró un libro con el que podías programar tus juegos y jugar con ellos sobre la marcha. Yo no sabía ni leer ni escribir pero con aquello y sencillamente copiando lo del libro me los hacía en el momento (igual yo tardaba 2 horas en copiar 10 líneas de texto, a saber, así que en el momento es un decir...).
Y en contra de lo que todo el mundo recuerda, iba con cartuchos, no con cassettes.