Lo confieso:
Soy fetichista, pederasta y onanista cuando no me dejan follar, pedicar o irrumar.
Además soy una mala persona, porque durante mucho tiempo le he chorado el periódico al vecino y he meado en la vía pública (incluso en el casto de una moto ajena).
Impóngame el castigo o la penitencia, Sr. Justicia.
Espero que sirva en descargo mío el hecho de que voté al PP en las últimas erecciones (jajajajajajaajajajaja).