Gracias por tu aportación Cheesire, los pixies QUE GRANDES. ELLOS LO CREARON TODO, fueron los pioneros, en un ambiente musical frívolo e insustancial absolutamente pijo y popero, crearon el Grunge, lo más auténtico desde que Janis Joplin se desgañitaba por los escenarios.
Pero ahora quería deciros algo a todos los que habéis contestado aquí.
En primer lugar agradeceros una vez más vuestra aportación, me congratula que mis palabras hayan despertado vuestro interés y generado aquí esta división de opiniones donde cada uno deja sus experiencias y reflexiones, que a todos nos enriquecen. Pero se trataba de eso ni más ni menos que eso.
Por lo que, lo que he hecho yo aquí, más que mentir, ha sido inspirarme cual poeta en la realidad para recrear en este foro una situación que nos pueda dar que hablar.
Y me explico:
Todos sabemos que en el amor como en tantas cosas, existe lo real, lo tangible y lo que uno pueda idealizar. En este caso lo idealizado, irreal por ello, es mi triángulo, que no es más que un pensamiento que me vino ayer a la cabeza, sobre qué haría de encontrarse alguien en esa situación, que es un arquetipo con el que algunos os habéis podido identificar con experiencias propias de vuestra vida. Basado sin duda alguna en mi situación actual, pero sin tener en cuenta otros condicionantes que indefectiblemente la marcan y que no he comentado, porque romperían el triángulo y con ello el hilo y la historia aquí. Y yo como los periodistas me dejo guiar por esa máxima de "nunca dejes que la verdad estropee una buena historia".
Pero visto que he recibido privados e incluso sesiones de messenger por parte de personas con buena voluntad y simpatía hacia mí, que se han interesado por mi situación. No me queda otra que aclararlo desde aquí para todos.
Percutador no existe, es un nick con el que escribo aquí, como un telefilme de sobremesa está basado en hechos reales, pero siempre como mera inspiración para recrear una ficción, no es más que un personaje pseudoliterario. Mi vida, mis desengaños, mis logros y desilusiones, son solo el material con el que se nutren los sueños forísticos. Y es bonito pensar hasta el final que el Halcón tras un raspado de su capa de pintura luce como formado por oro macizo de 24 quilates con dos ojos hechos de rubíes, pero no es así.
Ahora os voy a abrir a la realidad a los que quieran ver este spoiler, porque muchos preferirán pensar en percutador como alguien real, pues me sucede como a Harry Haller: pues todos los que le tomaban cariño, no veían nunca en él más que uno de los dos lados. Algunos le querían como hombre distinguido, inteligente y original y se quedaban aterrados y defraudados cuando de pronto descubrían en él al lobo. Y esto era irremediable, pues Harry quería, como todo individuo, ser amado en su totalidad y no podía, por lo mismo, principalmente ante aquellos cuyo afecto le importaba mucho, esconder al lobo y repudiarlo. Pero también había otros que precisamente amaban en él al lobo, precisamente a lo espontáneo, salvaje, indómito, peligroso y violento, y a éstos, a su vez, les producía luego extraordinaria decepción y pena que de pronto el fiero y perverso lobo fuera además un hombre, tuviera dentro de sí afanes de bondad y de dulzura y quisiera además escuchar a Mozart, leer versos y tener ideales de humanidad. Singularmente éstos eran, por lo general, los más decepcionados e irritados, y de este modo llevaba el lobo estepario su propia duplicidad y discordia interna también a todas las existencias extrañas con las que se ponía en contacto.
Veréis amigos míos:
La realidad es mucho más prosaica, como de costumbre, que lo que escribe el Poeta.
Y no es otra que:
En este triángulo:
A es una persona con la que estoy a gusto, algo real tangible y por ende follable. No estoy seguro de mis sentimientos hacia ella, pero eso es hasta cierto punto normal. Y realmente no sé cómo acabará nuestra historia, posiblemente la deje o me deje ella, o no, o sigamos, o vete a saber. Pero mientras no la vea y no esté con ella, no voy a comerme la cabeza sobre lo que siento o no. Porque sé que parte de lo que siento por otras, si no toda, se debe a oscuros mecanismos de mi retorcida mente, como el hecho de que de alguna manera me dejara de lado al irse a trabajar a otra ciudad y eso generase en mí un inconsciente rencor y una sensación de pérdida que pretendiera suplir enfrascándome de lleno aquí en algo que en principio no me asustaba como son los intentos de conquistas virtuales, porque no dejaba de ser en parte irreal y por ende sin sentimiento de culpa. ¿Pero cuantos se han refugiado en los ligues por internet? Muchos han dejado volar su fantasía así, yo también. Además está el hecho de que siento que me comprometo más con ella y eso genera en mí un sentimiento de huida, de buscar otra cosa aunque sea patéticamente aquí, por si ya es mi última ocasión de saborearlo.
B es un personaje absolutamente deleznable, con el cual sabía desde el principio que nunca iba a tener nada. Porque ella jamás quedaría conmigo, como con nadie que haya tratado por aquí, ni con Messi ni con Cuxufrito, por ejemplo, porque para ella y así me lo confesó solo somos peones de un juego para entretenerla, fuera de eso no importamos lo más mínimo. Si tampoco la importa su novio al que humilla y defeca sobre él cada pocos días. Pero me cae bien y la tengo cariño, o cibercariño más bien, a pesar de que sé perfectamente, porque tonto aunque a veces lo parezca no soy y ya tengo canas en los cojones, que su único interés en mí es tratar de manipularme para sentirse poderosa y que agrande su ego. Como hace exactamente con los demás. Osea que es una historia imposible desde el principio, y en la que me involucré en parte por mi faceta masoca-autodestructiva y en parte porque necesitaba sentir antes de que la fría cuchilla del compromiso serio rebanara mis ansias de vivir otras cosas. Y la elegí a ella porque soy perezoso y me pillaba más cerca. Lo intenté con Cheesire, con Clonclon, con Profiterol, con quién más: ya ni me acuerdo. Ella solo es una zorrilla adolescente que disfruta tratando de manipular a los tíos, calentando un poquillo la bragueta por aquí, hablando de quedar para luego siempre cancelarlo (para mi alivio aunque no lo sepa, o bueno ahora sí) porque es que no siento absolutamente nada por ella, más que ese afecto que me provoca el contacto con otras personas aunque sea por aquí, y el morbo que me daba enfrascarme en esa relación virtual. La Jenny, como así la llamo, y testigo de eso es Blackjack (regístrate de una vez cabrón) o la perversa clonclon a la que me muero por ver en sujetador por su webcam y la que la envié un cínico mensaje hace tiempo acusándola por su perfidia hacia mí de haberme puesto en brazos de una Jenny, es un personaje, como digo nefasto, sin un atisbo de bonhomia o empatía y real y sólo preocupada de su pueril a la par que estúpido y dañino ego.
Es capaz de acusarme en su cinismo de perjudicar su relación, cuando una persona con la que no se tomaría ni un café, no tiene ni tendría nunca tal capacidad. Simplemente trata de hacerme sentir mal, pues como un vampiro emocional y así se lo dije, se alimenta de los sentimientos a menudo de dolor y frustración que genera en los demás. Es parafraseando a Nietszche el ser más abyecto de la Tierra "El parásito, que siendo incapaz de amar, se alimenta del amor de los demás". Así es la cucarachita mía.
Pero fuera de eso me resulta una tipa simpática, divertida y con la que me gusta conversar. Aunque después de esto nuestras conversaciones apuesto a que se acaban de manera drástica.
Respecto a C es una mujer que me da mucho morbo y sin duda la percutiría porque es inteligente, sensible, sabia, atractiva, dulce, cariñosa, amable y me resulta físicamente deseable. Ella sabe de mi situación real, que no virtual, de la que hemos hablado. Como también sabe que mientras yo esté comprometido con alguien, no le voy a engañar, porque no me parece justo, ni ético, ni normal hacer ese tipo de cosas que no me gustaría que me hicieran a mí. Puedo hacerlo por internet, ser terriblemente indecente y obsceno, porque no me siento culpable por cascármela viendo las tetillas de alguien, para mí es como hacerlo leyendo un relato pornográfico o visionando un vídeo de la Red, pero no voy a meterme en un hotel para follarme a una mujer y luego quedar con mi novia, pues para bien o para mal en persona soy transparente y no la podría mirar a la cara.
Y eso es todo amigos.
Al menos este hilo les ha servido para conversar sobre temas que nos pueden ocurrir a todos.
Un saludo.