GoogleTM
Baneado
- Registro
- 4 Abr 2013
- Mensajes
- 4.027
- Reacciones
- 3.243
Desde que empecé en el mundo de las relaciones femeninas siempre quise evitar el caos mental que se forma en una ruptura. La sensación aciaga y taciturna de malestar interior imposible de evitar. Imposible de silenciar en definitiva. Por ello he ido entrenando desde la primera vez que lo sufrí hace lustros y lustros cuando me dejó una novia de varios años por otro tío, un sistema de pseudo-infidelidad conductual. Lo he entrenado de tal forma y manera que en el devenir contractual de los años :icon_confused:, me es imposible actuar de otra manera, me sale natural. Pero creo, que ha sido peor el remedio que la enfermedad.
Ésto me ha llevado a tener un continuo caos en mis relaciones. Que no debería ser un problema si es un vaivén de experiencias y personas. Pero los años pasan el fruto se marchita y lo recibido apesta cada vez más. Cada vez me interesa menos el sexo, cada vez sueño con relaciones idílicas en las que ni creo, cada vez se genera un twisted world a toda vela:icon_neutral:
Ahora que lo pienso todo este hilo queda mejor con una banda sonora acorde a las circunstancias. El universo triste, desconocido y melancólico.
Ahora me encuentro en ese proceso, en el que me he equivocado en esas noches de desfase ulterior y toca pagar consecuencias. Exacto como algunos ya me habrán leído, me lié con la amiga de mi novia, pero ojo, sólo liar, no picar ni sexo hardshit. He sido descubierto, y ahora no quiero asumir mi fallo. Así que dando sentido al título de este tema, ¿cómo puede ser que incluso siendo el autor del "crimen" pueda estar tan tristorro ahora? ¿por egoísmo de que al vivir juntos pagaba la mitad de todo, me hacía la comida...? ¿porque me hacía compañía? ¿o porque realmente la quiero pero no se demostrarlo por lo citado anteriormente?
Hete aquí expertos del foro si han conseguido crear un sistema de protección infalible ante tales sensaciones. Se los agradeceré eternamente con más fiestas con cachondo mental, llegado el caso :jejeje:
Ésto me ha llevado a tener un continuo caos en mis relaciones. Que no debería ser un problema si es un vaivén de experiencias y personas. Pero los años pasan el fruto se marchita y lo recibido apesta cada vez más. Cada vez me interesa menos el sexo, cada vez sueño con relaciones idílicas en las que ni creo, cada vez se genera un twisted world a toda vela:icon_neutral:
Ahora que lo pienso todo este hilo queda mejor con una banda sonora acorde a las circunstancias. El universo triste, desconocido y melancólico.
Ahora me encuentro en ese proceso, en el que me he equivocado en esas noches de desfase ulterior y toca pagar consecuencias. Exacto como algunos ya me habrán leído, me lié con la amiga de mi novia, pero ojo, sólo liar, no picar ni sexo hardshit. He sido descubierto, y ahora no quiero asumir mi fallo. Así que dando sentido al título de este tema, ¿cómo puede ser que incluso siendo el autor del "crimen" pueda estar tan tristorro ahora? ¿por egoísmo de que al vivir juntos pagaba la mitad de todo, me hacía la comida...? ¿porque me hacía compañía? ¿o porque realmente la quiero pero no se demostrarlo por lo citado anteriormente?
Hete aquí expertos del foro si han conseguido crear un sistema de protección infalible ante tales sensaciones. Se los agradeceré eternamente con más fiestas con cachondo mental, llegado el caso :jejeje: