Las putas prefieren el puterío porque ganan mucho más dinero con el mínimo esfuerzo y porque en el fondo son putas y les gusta. Yo he hablado con unas pocas y ninguna quiere dejar el negocio para irse a otro donde tiene que madrugar todos los días, con horarios estrictos, un jefe que te controla, un sueldo de mierda a final de mes, etc. Para eso se meten a putas, sin horarios, cuando a ellas les apetece, el dinero lo pillan por adelantado y todos los días tienen billetes fresco en las manos para sus cosas, con los puteros guapos* disfrutan, con los puteros sumisos lo gozan haciéndolos de sufrir. La que se hace vieja en el oficio se retira del ruedo con el primer putero con paga u olivos en llano que pilla. Tienen la sanidad gratuita aunque no coticen, tienen dinero fresco y constante para ser independientes y viajan por el territorio con las campañas itinerantes en pisos con plazas libres. Los sueldos normales de cuidadora de ancianos no les sirve porque no les da para mandar remesas a sus padres e hijos en su país, vivir aquí de alquiler y disfrutar la vida, joder, que para eso han lograda salir del pozo y llegar al paraíso.
Para la mentalidad de una española es asqueroso esto, pero para muchas extranjeras venir al primer mundo (ilegalmente) y ganar dinero para mandárselo a sus familiares es un triunfo. La sociedad española hereda el puritanismo del nacionalcatolicismo de Franco y no comprende que en otros sitios y culturas el que una mujer se gane la vida con sus servicios sexuales no supone mayor problema.
Yo como soy bastante inocentón algunas veces les he preguntado que si no les gustaría trabajar de otra cosa, y empiezan a poner escusas y al final la conclusión es que no saben hacer nada, que no tienen oficios aprendidos, y que tienen un carácter rebelde y les gusta la senda de la perdición. Y hay que respetar su decisión porque esto es un país libre y cada uno elige la vida que quiere o puede.