Bueno, parece ser que un nuevo libro va a recoger las pifilas de Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II, conocido por su rápido ingenio y frecuentes comentarios fuera de tono.
A lo largo de estos más de 50 años de matrimonio, ha causado diversos problemas protocolarios dado su temperamento enérgico y su irritación al tener que caminar dos pasos por detrás de su esposa.
El libro cuenta cómo Felipe, representando a la soberana en una ceremonia por la independencia de Kenia del Reino Unido, se dirigió al nuevo dirigente del país antes de que se arriara la bandera británica, y le espetó: "¿Seguro que quiere hacer esto?".
Son conocidas sus alusiones, consideradas por algunos xenófobas, a los ojos "como ranuras" de los chinos, las "barrigotas" de los húngaros y al "pijama" que supuestamente visten los nigerianos

Como buen ejemplo de eventos aburridos nombró las ceremonias de inauguración y cierre de los Juegos Olímpicos, que son para él "una plaga terrible" y deberían ser prohibidas.
A lo largo de estos más de 50 años de matrimonio, ha causado diversos problemas protocolarios dado su temperamento enérgico y su irritación al tener que caminar dos pasos por detrás de su esposa.

El libro cuenta cómo Felipe, representando a la soberana en una ceremonia por la independencia de Kenia del Reino Unido, se dirigió al nuevo dirigente del país antes de que se arriara la bandera británica, y le espetó: "¿Seguro que quiere hacer esto?".
Son conocidas sus alusiones, consideradas por algunos xenófobas, a los ojos "como ranuras" de los chinos, las "barrigotas" de los húngaros y al "pijama" que supuestamente visten los nigerianos



Como buen ejemplo de eventos aburridos nombró las ceremonias de inauguración y cierre de los Juegos Olímpicos, que son para él "una plaga terrible" y deberían ser prohibidas.