Haller me sacaron a que me la comieran en la sala Bagdad cual Dinio

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, con su físico no tiene mérito alguno, no es mérito suyo, eso es lo mínimo a lo que podía aspirar con ese físico que lo toco.
Claro, empalmar como un caballo y ser un martillo neumático percutiendo a máxima potencia en cualquier situación es "el físico que le tocó". Tener cojones y aprovechar, buscar o crear oportunidades que nadie tiene es "el físico que le tocó".

Es echao parlante por "el físico que le tocó". Porque no hay gente comiéndose el mundo estando genéticamente jodidos. Ni tíos con su físico que son unos llorones y no han levantado cabeza en su vida (y follan menos use Ferris).
 
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Claro, empalmar como un caballo y ser un martillo neumático percutiendo a máxima potencia en cualquier situación es "el físico que le tocó". Tener cojones y aprovechar, buscar o crear oportunidades que nadie tiene es "el físico que le tocó".

Es echao parlante por "el físico que le tocó". Porque no hay gente comiéndose el mundo estando genéticamente jodidos. Ni tíos con su físico que son unos llorones y no han levantado cabeza en su vida (y follan menos use Ferris).

Sí y no.

Este tío empezó muy joven. Yo no sé vosotros, pero yo de joven era ver una falda caminando a lo lejos y la polla se me empalmaba como un palo.

Y que si hay cámaras y que si hay cámaras... no hombre no, lo que hay sobre todo es una pedazo de tía chupandote el rabo y todo un escenario fabricado para ello.

En la época anterior a Torbe (él empezó a cambiarlo) el porno español era un puto círculo hermético más cerrado que la selección italiana de fútbol. Los cuatro de siempre zumbandose a las cuatro de siempre. La puerta estaba siempre cerrada fuera de ese círculo.

La famosa "Juani", dueña del Bagdad, ya entonces como ahora, en los casting pues a los tios exigía primero que fueras con tu pareja con la que actuabas, nunca el tío solo, y aparte de follar bien que tuvieras ese físico monumental. Le chupaba un huevo si el tío era un follador empedernido y perfecto pero era un tirillas, un gordo o cualquier cosa que no coincidiera con un Nacho Vidal: no los quería ni los quiere.

Luego, claro, aquello que a él le tiene que gustar, que bajo mi prisma es fácil, bajo el prisma de otros tíos llevar esa vida como que no. Luego el carisma y el rollo golfete. Luego caer en gracia y todo eso.

Quiero decir, fácil lo tuvo con ese cuerpo y en aquella época, pero él también nació para eso y puso de su parte, y fue aceptado por el grupito chupipandi que bloquea cualquier otra opción.
 
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