Dice el refrán que no es oro todo lo que reluce y un ejemplo podría ser la buena relación que parecían mantener Seydou Keita y Pep Guardiola. El técnico llegó a decir públicamente que el africano "es una de mis niñitas", algo que no le gustó al futbolista porque luego no se correspondía a la hora de confeccionar las alineaciones.
Keita, que ya ha debutado con el Dalian Aerbin chino, concedió una entrevista al diario maliense Match en la que explicaba que su marcha se debía a motivos económicos pero quiso dejar claro otras causas. "He escuchado decir muchas veces que Guardiola me quería mucho. Como él hablaba bien de mí la gente se hacía esa composición, pensaba que todo estaba bien. Pero luego no jugaba", explica.
Y añade: "Lo único que lamento hoy día guarda relación con esas palabras que él ha tenido hacia mí. Hablamos de hombre a hombre porque no me parecía bien que me elogiara y luego no me pusiera en el equipo".
Sus continuas suplencias acabaron con su paciencia, motivo por el que decidió aceptar una nueva oferta: "En el Barcelona supone una preocupación el hecho de que juegas un partido para luego ser suplente en los dos siguientes. Eso constituye un handicap físico. En China puedes llenar ese vacío físico".