rendder rebuznó:
En los últimos días, siguiendo la "táctica Black Adder" de infiltración gratuita en cadenas posh de ginlasios he entrenado, gañotazo mediante, en uno de ellos con varias plantas, mancuernas cromadas, hileras de cintas frente a grandes Tvs con el Sálvame puesto... En fin, se hacen ustedes a la idea.
El primer día hice PM. Seguro que los Rolling actuando en la Superbowl se sintieron menos observados. No debía ser un ejercicio frecuente en aquellos lares, pero unos de soslayo y otros abiertamente no quitaban ojo de cada alzamiento. He decir que no pasé de unos pauper (para estos lares) 167 kgs, pero el que llegue allí un sardina con su propio cinturón, magnesio líquido, deje los discos hechos un cristo y bufe como un becerro se salía de sus rutinarias mecánicas mancuerniles.
Al turrón: desde que llegué vi que no había jaula. Malo. Observé una multi, pero no le hice ningún caso. El segundo día, y descansando tras un ejercicio, me fijé un poco más en aquella máquina satánica y pude ver que en su lateral había una pegatina que indicaba el límite máximo de carga de la misma en... 120 kgs. WTF? Seguí con lo mío y luego me animé a probarla, primero sin peso para ver cómo circulaba la barra y luego ya veríamos. Dios santo, qué sensación de inseguridad. Qué miedo. Aquello vibrama y hacía unas cosas extrañísimas. Entendí el por qué de aquellos 120 kgs. Meter, no ya 120, sino tan sólo 20 en aquel invento demoníaco era acabar como Christopher Reeve. Me alejé aceleradamente de ahí, como cura portador de ébola.