Historias de alcoba

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Malory

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4 Jun 2006
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Seguro que muchos de nosotros tenemos historias de cama chanantes, bizarras, vergonzantes o divertidas. Mmmm muchos de nosotros no porque aquí no folla ni Perry, pero bueno, el caso es que…

Una vez fui con mis padres y una pareja amiga suya de viaje. Esta pareja tenía una hija, bastante pija por cierto, la cual también vino con nosotros. Estuvimos cuatro días en un hotel muy bonico en la sierra, pues casi no intercambié palabra alguna con ella en los tres primeros días, hasta que llegó la última noche.

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Por suerte mi hermano también vino al viaje, así que los días se hicieron más o menos soportables, ya que la habitación la compartíamos los tres.

Pues bien, llegó la última noche y ya estábamos los tres en nuestras respectivas camas viendo la tele, recuerdo que estaban poniendo uno de esos cutre programas de cotilleos donde al final una tía se desnudaba y bailaba.
De vez en cuando miraba de reojo y veía a la pijilla sonreír, así que decidí romper el hielo y comentar algo del programa. Mi hermano también se unió a la conversación y en menos de cinco minutos ya nos estaba hablando de su novio. Por lo visto llevaba unos meses saliendo con un chico que la tenía loca, él era de otra ciudad por lo que no se veían mucho. De vez en cuando ella soltaba un desesperante “ufff como le echo de menos”, comentario que pasó, entrada la confianza que da una habitación perdida en la montaña, a un lascivo “que ganas tengo de follármelo”.

La pija se retorcía en las sabanas entre risas histéricas y comentarios subidos de tono. Me costó asimilar el cambio, pero una vez lo asumí me contagió de esa poca vergüenza y me dio por alegrar el ambiente con dispares historietas sexuales.
Mi hermano, que no había follado en su puta vida, tenía la cabeza roja a punto de estallar.
Aprovechando la situación le dijo a la pava que tenía condones, ella sin dudarlo le dijo que le diera uno. Mi hermano estaba histérico, saltando de una cama a otra como un mandril en celo.
Se tumbó encima de ésta y la muy golfa se quitó la ropa. La situación estaba tomando un matiz muy chungo para mis delicados ojos.
Ella era una buena calienta pollas, así que tan solo se dejó manosear un poco y luego le apartó diciendo tengo que hacer algo, estoy muy caliente, pero no puedo serle infiel a mi novio (+ risa histérica).

Soy una tía discreta aunque con muy poca vergüenza, pero la situación me superó. Ella se metía en mi cama desnuda a medio meterme mano, cosa que no me agradaba al estar mi hermano al lado. Que yo he follado con mi hermano al lado eh, y además en un hotel y con mi primo, como ya conté… pero aquella vez estaba dormido.

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Aquella tarde nos habían subido del restaurante una cesta de frutas para merendar, manzanas, peras, melocotones y PLATANOS. Maldita la hora en la que la salida esta unió las palabras plátano y condón en su enferma cabeza. Sin dudarlo cogió un plátano, el condón que mi hermano le había dado, se abrió de piernas y se lo metió por el chichi delante del macaco en celo de mi hermano y mi asombrado rostro.

Intenté normalizar la situación y la observé hasta el final, como el que se va a África de safari a ver leones. Mi hermano pajeándose, la pava esta con el plátano, casi parecía la selva, y yo ahí en medio traumatizada.

Yo duermo boca abajo, pues a la mañana siguiente me despertó pasándome el plátano por el trasero en plan chistosa. Me tuve que reír e incluso me dio cierta morriña despedirme de una personajilla tan peculiar.

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Cuando era adolescente mi mejor amiga me pidió el favor de hacer de coartada ante sus padres, ya que había quedado con un chico algo mayor. Como le debía más de un favor accedí, e incluso salimos los tres juntos. Estábamos paseando por el puente de Triana cuando los dos acaramelados se empezaron a comer la boca de forma repulsiva ante mis ojos, así que les dije que se metieran entre los matorrales a desahogarse mientras yo me fumaba un pitillo en la acera.

Al terminarme el pitillo me asomé un poco y la vi haciéndole una felación al baboso del novio, me puse un poco nerviosa a mirar para todos lados por si alguien les veía. Y en una de esas, casi sin esperarlo, se acerca un policía que me pregunta si estoy bien. El poli se habría pensado que me iba a tirar por el puente o algo. Como soy un manojo de nervios le dije que no medio tartamudeando y empezó a soltarme una charla de la vida tan infumable como este hilo.
Detrás tenia a mi mejor amiga comiéndole el rabo a un tío y delante a un policía viejuno hablándome de valores.

Le intenté cortar y le volví a decir que tan solo estaba mirando el río y el paisaje, así que temblorosa me adentré entre los matorrales, idiota de mi, para avisar a los dos guarrones de que estaba ahí la policía.

El policía sigiloso me siguió y se encontró de lleno con el lamentable espectáculo, a mi amiga con todo el culo lleno de césped pegado botando encima del tirillas del novio y a éste gimiendo como un ñu. A partir de ahí mi mente se bloqueó y entré en una espiral de gritos y lagrimas.

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Lamentablemente terminamos todos en comisaría + el extra vergonzante de dar la cara ante nuestras respectivas familias.
 
DON´T FEAR THE EYES OF THE DARK LORDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD!!!!!!!


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¿Es éste el hilo donde se hace +1, donde la gente comenta lo que le sale de la poya? A no que el hilo no es para comentar. Pues nose me ha gustado la historia y tal, hasta error de condón entra al foro ligue ya. :lol:
 
Citrico rebuznó:
¿Es éste el hilo donde se hace +1, donde la gente comenta lo que le sale de la poya? A no que el hilo no es para comentar. Pues nose me ha gustado la historia y tal, hasta error de condón entra al foro ligue ya. :lol:

Hombre, esperaba vuestras historias con ansia, inventarosla si quereis! pero contad algo jodidos frikis!
Me habeis jodido la vida.
 
Pues al final va a ser que los "expertos" del ligue no tienen una puta historia en su arsenal de frikadas vividas.

Un finde hace 6 años lo pase con mi ex en casa de unas amigas, nos dejaban un cuarto en su piso en el sur de la isla, con la playita al lado. Ellas estudiaban allí..

Lo típico, en teoría por la mañana se iban y nos dejaban sólos en un colchon inflable muy majo y, claro, había calentón mañanero. La cosa se puso divertida, primer polvo, cigarrito para ella cocacola para mi, segundo polvo, charla absurda, tercer polvo y llega el problema, nos da por jugar al anal.

Me tocaba buscar lubricante, misión suicida en pelotas y semi empalmado, con ese pringue brillante que empapa el cipote tras varios polvos y di con vaselina de esa de tubo que les dan a los ancianos en las farmacias para problemas varios.

Hasta ahí todo bien, juegos previos, vaselina (El peor lubricante puaj) por aquí, vaselina por allá y procedemos al injerto de clase ALFA by the anal way. Primeros empujones para abrir paso y entonces empiezo a divertirme pero algo profundo y enigmático llega a mis fosas nasales ¡¡HUELE A MIERDA!!

Rápidamente extraje el nabo del huerto esfinteriano, que parecía un magnum crocanti seguido de un río de chocolate almendrado liquido que desbordaba aquellas nalgas.

De repente, plas plas plas, tocaban a la puerta y cada vez con mayor mosqueo porque la dueña de la casa no llevaba llaves, había quedado con nosotros y nos había dejado las herramientas cerrajeras por si queríamos salir más temprano.

Yo corriendo por el pasillo con el colgajo lleno de mierda, ella limpiando sus heces del colchón con el culo marrón y la otra aporreando la puerta, hermoso.

Cuando porfín conseguimos limpiar aquello en 3 largos segundos, mi ex abrió la puerta apestando a mierda, la otra con cara de mosqueada preguntaba por otra de las compañeras de piso.

Solución:

La compañera desaparecida había dejado a los del curro preocupados y no respondía, la chavala estaba dormida en la habitación colindante y nos contó que pretendía salir a currar pero cada vez que se armaba de valor empezabamos a follar otra vez y le daba palo, así que se quedo dormida.

Hermosa tarde.
 
me viene a la cabeza una, pero en su momento no me hizo mucha gracia

estando con una ex en un pinar, al rato me di cuenta que habia una cabeza pegada al cristal del coche
en los siguientes 2 segundos (tengo mejores reflejos que mopor), recupere el corazon del suelo y me lo volvi a meter en el pecho, me quite de encima a la chica, agarre una barra antirrobo que tenia junto al asiento del conductor y sali a la caza del cotilla. pero el susodicho debia tener +7 en velocidad y lo perdi de vista

lo que me resulta imposible recordar es si sali del coche vestido o con el soldadito apuntando al norte
 
DraaK rebuznó:
me viene a la cabeza una, pero en su momento no me hizo mucha gracia

estando con una ex en un pinar, al rato me di cuenta que habia una cabeza pegada al cristal del coche
en los siguientes 2 segundos (tengo mejores reflejos que mopor), recupere el corazon del suelo y me lo volvi a meter en el pecho, me quite de encima a la chica, agarre una barra antirrobo que tenia junto al asiento del conductor y sali a la caza del cotilla. pero el susodicho debia tener +7 en velocidad y lo perdi de vista

lo que me resulta imposible recordar es si sali del coche vestido o con el soldadito apuntando al norte

HUBIERA QUEDADO USTED GRANDE DE HABER DICHO QUE LA BARRA ANTIRROBO Y EL SOLDADITO ERAN UNO.
 
Malory rebuznó:
Hombre, esperaba vuestras historias con ansia, inventarosla si quereis! pero contad algo jodidos frikis!
Me habeis jodido la vida.



no simpatizo contigo, porque creo que te huele hasta el alma...pero eso no viene al caso.
Me sorprendo a mi mismo riendome con tu post, bien contado y con una anecdota interesante. Y ahora esa frase de me habeis jodido la vida...(muy ama), y el avatar de mi idolatrado dave. Algo esta pasando.

No tengo ninguna anecdota sexual. Nunca he follado así que como tu hermano, yo andaría pegando saltos de cama en cama cual mandril en celo con la pija del platano
 
Moporday rebuznó:
Pues al final va a ser que los "expertos" del ligue no tienen una puta historia en su arsenal de frikadas vividas.

Un finde hace 6 años lo pase con mi ex en casa de unas amigas, nos dejaban un cuarto en su piso en el sur de la isla, con la playita al lado. Ellas estudiaban allí..

Lo típico, en teoría por la mañana se iban y nos dejaban sólos en un colchon inflable muy majo y, claro, había calentón mañanero. La cosa se puso divertida, primer polvo, cigarrito para ella cocacola para mi, segundo polvo, charla absurda, tercer polvo y llega el problema, nos da por jugar al anal.

Me tocaba buscar lubricante, misión suicida en pelotas y semi empalmado, con ese pringue brillante que empapa el cipote tras varios polvos y di con vaselina de esa de tubo que les dan a los ancianos en las farmacias para problemas varios.

Hasta ahí todo bien, juegos previos, vaselina (El peor lubricante puaj) por aquí, vaselina por allá y procedemos al injerto de clase ALFA by the anal way. Primeros empujones para abrir paso y entonces empiezo a divertirme pero algo profundo y enigmático llega a mis fosas nasales ¡¡HUELE A MIERDA!!

Rápidamente extraje el nabo del huerto esfinteriano, que parecía un magnum crocanti seguido de un río de chocolate almendrado liquido que desbordaba aquellas nalgas.

De repente, plas plas plas, tocaban a la puerta y cada vez con mayor mosqueo porque la dueña de la casa no llevaba llaves, había quedado con nosotros y nos había dejado las herramientas cerrajeras por si queríamos salir más temprano.

Yo corriendo por el pasillo con el colgajo lleno de mierda, ella limpiando sus heces del colchón con el culo marrón y la otra aporreando la puerta, hermoso.

Cuando porfín conseguimos limpiar aquello en 3 largos segundos, mi ex abrió la puerta apestando a mierda, la otra con cara de mosqueada preguntaba por otra de las compañeras de piso.

Solución:

La compañera desaparecida había dejado a los del curro preocupados y no respondía, la chavala estaba dormida en la habitación colindante y nos contó que pretendía salir a currar pero cada vez que se armaba de valor empezabamos a follar otra vez y le daba palo, así que se quedo dormida.

Hermosa tarde.

Acojonante el relato.

Me he divertido cantidad...

A ver si hay suerte y la gente pone más.

:0)
 
Hace tiempo con 16 años le descubri a mi padre una revista porno, estaba nueva, al cabo de 4 años seguia en el mismo sitio pero con varias hojas pegadas y rotas. ¿Se daria cuenta de que le cogia la revista?
 
Me matará cuando descubra este post, pero ya puestos… realmente casi - follé con Cheshire’s Katua.

No fue nada del otro mundo, ni lo considero una anécdota divertida, pero como el tema “foreras” siempre da juego, pues lo cuento.

Haciendo rutas, hace unos meses, pasaba bastante por Zaragoza. Primero lo típico, el mail tonto o el m.p. travieso, el tonteo pese a que en el foro hacemos como que no nos caemos nada bien mutuamente, hasta que coincidió un sábado sabadote en el que la susodicha no tenía cita con ningún cabezón, y eso unido al “¿a que no te ATREVES a tomarte un café conmigo?” pareció activar los resortes neuronales de dicha cabezona, y quedamos.

Nada especial, la verdad. Creo que estaba yo más nervioso que ella, pues su mirada decía lo que yo ya sabía: “eres muy del montón, no me follas ni de casualidad”, y mi mirada decía lo que ella ya sabía: “tampoco es que seas una supermodelo, pero te comía el coño de todas – todas”.

Total, que la cosa se fue relajando y entre cerveza y cerveza, comentando cosillas del foro y alternándolas con cosillas de fuera del foro que no vienen a cuento, acabamos cenando en un restaurante de precio conservador pero de buen servicio que ella conocía.

Una botella y media larga de vino tinto local más tarde, y estuvo dispuesta a presentarme a su gato.

Decir que en todo momento me tome la “cita” como un modo de pasar el tiempo, que para nada habría yo supuesto que habría acercamiento carnal alguno, y que ni mucho menos iba con intención de ligar. Pero oye… si surge, al lío ¿o no?.

Total, que no entraré en los detalles de la “seducción”, pero sí diré que casi sin pretenderlo acabé acariciando sus partes pudendas y ejecutando malamente algún que otro beso.

Evidentemente ella no quería tema, pero supongo que entre el vino (que si, que si, katua, que YA SÉ que fue por culpa del vino) y mis caricias, se fue calentando la cosa y acabamos tonteando en la cama.

Le comí el coño.


Y le gustó, de eso no hay duda porque el orgasmo ese no lo podría haber fingido ni ensayando antes. Lo malo fue que tras eso y lo que pareció ser su “frase de despedida: me he quedao muerta”, se echó a dormir de espaldas a mi, mostrando su (tengo que decirlo en honor a la verdad) enorme culo y roncando (si, si, por efecto del vino también) suavemente.

Me habría quedado toda la noche e intentado el polvo mañanero (porque para ser sinceros, mi poya ni la rozó), pero tenía que salir de nuevo de ruta a las cinco de la mañana, así que nada, un “me voy” susurrado que luego me confesó que ni oyó, y la dejé allí, con sus sueños etílicos.

En fin, que así quedó la cosa.

Y antes de que me acuséis de ser alguien sin honor ni escrúpulos a la hora de contar sus secretos de alcoba y exponer a la susodicha a las burlas ajenas, diré que esta historia, en honor a Malory, es inventada. Así que TONTO EL QUE “LOLEA”.

Un bechi a todos desde el pabellón B del psiquiátrico de Alcolea.


P.D. Aprovecho para comentar que últimamente me pone mucho Pepoo con sus locuras e histrionismo, realmente la adoro, y estoy deseando saber el desenlace con el cura de su iglesia mañana domingo.

P.D.D. Danita, aunque te pese, Amarie es, y siempre será, muy AMA, y nunca, aunque también te pese, tendrás la valía y el amor que este foro le profesa. Te jodes.
 
Mopor, me acabo de dar cuenta de que somos hermanos de mandíbula.
 
Lo peor que te puede pasar en la vida es que los profesores a los que has estado peloteando todo un año descubran tu verdadero yo. Y la cosa se puede poner muy tensa si para colmo te desenmascaran a las puertas del temido junio.

Desde que llegué a la facultad he estado intentando camelarme al director, a los profesores y a las secretarias, dando lo mejor de mi persona.
Era extremadamente simpática con todos ellos, siempre con una palabra amable y con la sonrisa impecable. Aunque bien sabe Satán que mi alma se retorcía furiosa maldiciendo sus nombres.

Cada mañana elogiaba a las secretarias alabándoles la ropa, el peinado o el maquillaje, pero era cruzar la esquina para subir a clase y mis labios empezaban a descargar toda clase de insultos y ultrajes silenciosos.

Me disponía a ir a la facultad dos horas antes para exponer el trabajo final cuando sonó el teléfono. Era mi novio, tenia la mañana libre y quería desayunar conmigo. Le dije que se viniera conmigo a la uni y así desayunábamos y ensayaba con él la exposición.

Y así fue, al llegar a la universidad fui a saludar, como de costumbre, a las secretarias. Una de ellas tenía la foto de su bebe en la mesa, así que aproveché para soltar toda clase de ñoñerías del tipo que cosita más rica, es de los bebes más bonitos que he visto en mi vida, ha salido a su madre, bla bla bla.

Fuimos a desayunar y al terminar subimos a una de las clases para ensayar, pero el expositor no estaba. Los cañones, expositores, etc los guardaban en un cuartito de la primera planta bajo llave. Bajé de nuevo a secretaria y les pedí la llave, por supuesto Malory, y no te preocupes por dárnosla ahora, cuando termines la exposición me bajas la llave.

-Muchas gracias (puta).


Entré con mi novio en ese cuartichi lleno de carpetas, bolígrafos, llaveros y camisetas con la marca de la universidad. Eso nos provocó un empalme mental alucinante, y a él también físico claro. Me empezó a meter mano y a decirme que tenía que liberarme del estrés acumulado allí mismo, y yo, como buena amante de las situaciones de riesgo, le empecé a devorar hasta el alma. Acabamos follando como cerdos encima de las carpetas, una cosa rápida claro. Entre risas y gemidos soltaba de vez en cuando algunas joyitas del tipo vaya cabezón que tiene el bebe de la secretaria, vamos a ensuciar esta puta facultad de pecado o a la secretaria se le notaba toda la raja del choucho con esos pantalones.

Al terminar nos llevamos bolígrafos, dos carpetas y mogollón de folios, no se iba a notar, había muchísimas cajas.
Ensayé la exposición y me salió fenomenal, luego la expuse aun mejor gracias al polvo y a la liberación de adrenalina que había tenido momentos antes.
Me disponía a entregar la llave en secretaria cuando me encontré con las tres secretarias y al director mirándome fijamente. Un escalofrío me recorrió todo el cuerpo. Ven aquí señorita.
¿Sabes que en el cuarto de los expositores hay cámara?


Me derrumbé, la falsa sonrisa se transformó en llanto, no pude articular palabra. Todas mis maldiciones fueron vengadas en ese preciso momento, las secretarias me miraban con desprecio, que poca vergüenza Malory, no nos esperábamos esto de ti. Y las cosas ya las puedes ir devolviendo.

Jamás en la vida había pasado tanta vergüenza, desesperación y arrepentimiento. Hoy me lo tomo como una anécdota más, pero en su día me costó un año más de carrera y una de tantas broncas más de mis amados padres.

No seáis falsos queridos foreros, y si lo sois percataros de que no os estén grabando.

P.D: Que alegría verte por aquí Jose David.
 
:shock: Todo esto qué grado de fantasía tiene así entre el 9.5 - 10?. Esto es imposible que le pase a una persona normal. O eres de delegación de alumnos, o estudias en una universidad pequeña, sino por los cojones te iban a dan las llaves.
 
Hilo también repe, pero bueno, me ha venido a la mente una anécdota de esas que nunca pude contar a mis amigos (total no me habrían creído), ni a mis siguientes novias...

Lorena fue mi novia en torno a los 20 años. Salimos más o menos dos años, algo menos quizá.

Era una chica de mi ciudad con la que tenía una relación para mí entonces perfecta: nos llamábamos novios ("estamos saliendo") pero más bien éramos amigos con derecho a roce. Nos veíamos los domingos por la tarde, nos tomábamos unos vinos, luego venía el postre (no había casa, no había coche, pero siempre se discurría algún escondite). Antes de aquella relación ninguno de los dos había tenido demasiada experiencia sexual, o al menos eso nos habíamos contado, pero luego nos conocimos muy bien.

Creo que nos pusimos los cuernotes unas cuantas veces mutuamente, pero había cosas que era mejor no preguntar... En mi escasa vida amorosa creo que nunca volví a tener una relación parecida, con tanta duración y tan poco compromiso. Para mi grado de madurez y lo que entonces quería, era una relación perfecta. (Bueno, no sé si habré madurado mucho desde entonces)

De todos modos Lorena me acabó dejando por mi falta de compromiso (textual)

Habiéndolo dejado ya con Lorena, conocí y empecé a salir con mi ex novia (en torno a los 21-22), con la que estuve un montón de años, la clásica "novia de toda la vida".

Llevaba un mes o así saliendo con ella y una noche de juerga con unos amigos me encontré con Lorena. Desde que lo habíamos dejado casi no habíamos hablado, sólo algo por teléfono (no había móvil, ni internet, las comunicaciones eran un concepto diferente al de hoy... y supongo que tampoco había mucho que hablar...). Un par de llamadas educadas, poco más.

Quizá hacía tres meses de la ruptura, Lorena me contó que ya se había enterado de mi nueva relación. Hablamos un rato -diez minutos como mucho- y nos pegó un calentón. No recuérdo ni de qué hablábamos en ese momento, pero de repente nos estábamos pegando un morreo en plan adolescente en el medio de la calle. Hacía un frío horrible (era invierno) y se nos ocurrió ir a casa de su abuela.

Lorena habitualmente se turnaba con su hermana para cuidar a su abuela, por semanas. La abuela no estaba enferma, pero sí bastante mayor. Tomaba pastillas antes de acostarse debido a lo cual dormía muy profundamente, hasta el punto de que algunas veces habíamos subido de noche a la habitación de Lorena para lo del postre... y nunca se enteró de nada...! Teníamos todo calculado, las pastillas duraban 7 horas y después se despertaba casi de modo automático, pero mientras duraba el efecto, se podía caer la casa que la abuela seguía durmiendo.

Y, claro, en pleno calentón-subidón, nos montamos en mi viejito ciclomotor y nos fuimos a casa de su abuela.

Y nos dejamos llevar. Creo que yo subí bastante cargadito de copas, recuerdo la clásica autopregunta mental del varón de tipo "espero no estar muy ciego, a ver si ahora no doy la talla". Me "bajé". Estuve mucho rato allí enterrado bajo las sábanas...

Creo que en el año y pico largo que habíamos estado juntos nunca había oído gritar así a Lorena. Y claro, yo emocionado y orgulloso, allí abajo seguí. No recuerdo cuánto tiempo, supongo que perdí la noción del mismo, pero mucho rato...

Y ya ni me acordé de las copas ni de las dudas de virilidad. Y subí. Misionero tradicional: plena fiesta, fuegos artificales, gritos, risas, gemidos... y ¡plaf! se encendió la luz:
¡La abuela!

En un hábil movimiento de sábana, Lorena nos tapó. yo boca abajo, aplastado bajo la sábana, para ver si la abuela no se daba cuenta. Mas la abuela era vieja, pero no tonta.

- ¿Quen está aí? ¿Quen é?- y yo ni respiraba.
- Una amiga, abuela- dijo Lorena.

Pero la abuela no picó. Se acercó a la cama, y como Santo Tomás, quiso meter el dedo en la llaga: levantó la sábana de golpe. Yo estaba boca abajo, pálido, seguía sin respirar como si me hubiera muerto, o estuviera dormido.

Y la abuela empezó a gritar:

- ¡Ai, que desilusión! ¡Ai filliña que eu non esperaba esto de ti! ¡Como podes facer esto!

Y repetía esto una y otra vez.

Yo seguía boca abajo, completamente desnudo, destapado (creo que quien haya inventado la expresión de "tierra, trágame" vivió una situación similar).

La abuela se puso a rezar el rosario, de un lado al otro del pasillo de la casa.

En cuanto salió de la habitación, di un brinco y me metí debajo de la cama. Supongo que confiaba en que la abuela volviera a su cama y al día siguiente creyera que todo había sido un sueño, porque eran las 6 ó así, se suponía que las pastillas aún estaban haciendo efecto, faltaba una hora.

Y la abuela volvió a entrar en la habitación. Ahora yo estaba bajo la cama, boca arriba. La cama era muy baja, me encontraba prácticamente encajado.

Pero la abuela, repito, no era tonta:
- ¿Onde está?
- Quién, abuela.
- ¡Onde está! ¿Que está, debaixo da cama?

Mierda: en una situación así, normalmente los varones tenemos lo contrario de una erección: notamos contracción en los testículos y la picha se reduce a la nada.

Pero por algún proceso emocional que nunca llegué a comprender, me empalmé como un burro.

Y allí estaba, ridículo, completamente desnudo, encajado debajo de la cama, muerto de frío, empalmado (recuerdo hasta la sensación de incomodidad contra la tabla), discurriendo cómo podría salir de allí (era un cuarto piso, no podía salir por la ventana).

- Quero velo.
- ¿A quién, abuela?
- ¡Quero ver a ese rapaz!

Y, otra vez como Santo Tomás, se agachó para verme debajo de la cama. No sé si me vio la cara, la picha, el brazo, todo o nada. Yo cerraba los ojos como si fuera un avestruz. Y seguía empalmado.

Y la abuela se volvió a ir al pasillo, y continuó con el rosario.

En ese momento me vino la "inspiración flash": cogí todas cosas: la ropa, zapatos, tabaco, todo hecho una bola, ni me calcé. Y en una de las idas y venidas por el pasillo de la abuela rezando (la puerta de salida estaba más o menos en el medio), fui de puntillas detrás de ella.

En el momento en que abrí la puerta no miró hacia atrás. Supongo que era dura de oído, y además seguía rezando en alto. Cerré la puerta con cuidado (puede que sólo la dejara apoyada, no lo recuerdo) y bajé los cuatro pisos corriendo, descalzo, con la ropa hecha una pelota, saltando los escalones de dos en dos y de tres en tres.

Llegué abajo en plena taquicardia, me vestí corriendo en el rellano del portal, y ¡mierda! ¡Las llaves de la moto!

Puerta del portal cerrada, la moto con el candado puesto, ya casi era de día, me tenía que ir ya a mi casa o se despertaría mi padre, si iba andando, además de tardar un montón, tendría que dar explicaciones... por supuesto, no había móvil, y no era cosa de timbrar a la pobre Lorena.

Y de repente oí caer las llaves. Lorena, desde la ventana me dijo adiós con la mano, y se volvió a meter dentro.

Nunca más he vuelto a ver a Lorena.

Por supuesto, mi novia actual nunca supo nada.

(Después de haberlo contado más de diez años después, ya me puedo morir)
 
Fue una noche lluviosa de esas que se dan a menudo por estos lares.La lluvia me hizo entrar corriendo a toda hostia en el café Van Gogh,Van Goh o como cojones se escriba el nombre de ese chiflado holandés.Un encontronazo hizo que su zumo de piña acabara derramándose por mis pantalones y la parte de zumo que no acabó en los pantalones fué a parar sobre las obras completas de Raymond Chandler.Me miró,la miré y ahí empezaron mis problemas.El cuerpo precioso,unas tetas que posiblemente sean las mas perfectas que haya visto en mi vida.La cara,era la antítesis de lo que debe ser el rostro femenino,a veces la naturaleza es caprichosa a la hora de repartir sus dones.Pero bueno,era jueves y había que intentarlo.Empezamos a charlar,me contó que estaba pasando unos días en un balneario que hay aquí cerca,era la primera vez que visitaba esta ciudad,no conocía a nadie...etc.Al cabo de un rato sugirió cambiar de sitio.Al salir del café,con la poca confianza que dan dos cervezas,cogí su mano dubitativo.En el siguiente garito,mientras sonaba el "Lust for life" de Iggy Pop la besé,empezamos a meternos mano.De camino al coche parada técnica en cada portal,pero de follar nada,la muy puta acabó confesando que estaba casada.Al final después de mucho negociar triunfó la tesis europeista,o seá el francés,que mas que francés parecía alemán dada la brusquedad de movimientos de la interfecta.Lo mas loleante de todo es que me dí cuenta que estábamos al lado de una valla publicitaria enorme con una foto de ZP y el logo"Motivos para creer",no te jode a mi me lo vas a decir ZP.Siempre me preguntaré como puede haber una mujer casada que la chupe tan mal y encima que me la encuentre yo.Ni que decir tiene que ni la he vuelto a ver ni falta que hace.
 
Citrico rebuznó:
:shock: Todo esto qué grado de fantasía tiene así entre el 9.5 - 10?. Esto es imposible que le pase a una persona normal. O eres de delegación de alumnos, o estudias en una universidad pequeña, sino por los cojones te iban a dan las llaves.

Somos sólo 100 alumnos, más los que hacen el master, que vendrán a ser unos 50. Así que ya te podrás imaginar, nos conocemos todos.
 
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