Ayer quedé con ella, está en el local de Taquígraf Martí. Me recibió divina con un conjuntito de lencería y sandalias de tacón alto con tiras hasta los gemelos, todo a juego. La tía, físicamente, es un monumento; no había terminado de procesar toda la información de lo que estaba viendo y ya la tenía encima dándome de lengüetazos... Vamos, que seguí ese culo perfecto por el pasillo dando gracias al Señor.
Conocía muy bien su trato más cercano, su cuerpo a cuerpo a degüello, la sensualidad y el morbo con el que hace lo suyo dejándose comer con gusto y follando con frenesí; solo le faltaba soltarse un poco en la mamada, por eso cuando se arrodilló y me pegó semejante mamadón me voló la puta cabeza...
Ver a esta hembra chupándome la polla rollo purasangre desbocada clavándosela explosivamente desde el capullo hasta el final del tallo sin manos ni complejo ninguno fue como dar con una veta de oro.
Me tenía encendido al máximo, tanto que me tumbé con ella a devorarla esas tetas de revista que tiene, a comerla el coñito un buen rato y no podía ni concentrarme en darla lengua a nivel...
Me eché para atrás al borde de la cama y volvió a arrodillarse sin pegas; me trabajó el capullo con técnica y todo el nervio, en plan frenético. Me puse de pie y siguió empujándosela ella sola, cogiéndome por detrás de las rodillas y tirando hacia ella hasta el tope.
Cuando la pedí goma, yo ya era más animal que persona; pegamos un folladón de perros con gruñidos, mordiscos, lametones y una enganchada final increíble. Un servicio memorable.
Desde mi experiencia y opinión personal, Jhade a este nivel es un peligro nuclear, se lo lleva todo por delante...