Que después de 15 años de carrera, entre Sevilla, Arsenal (según las crónicas, le ficharon por entre 30 o 36 millones de Euros) Madrid, Benfica, Atlético, Espanyol y ahora dónde mierda jugara, que sólo deje 3 millones de Euros en inmobiliario, y digan los medios de comunicacion que era un gran inversor, da idea de lo simple que es la mentalidad de esta sociedad.
Estamos hablando de un pavo que en su carrera habrá amasado, sólo por su ficha del orden de 15-20 millones de euros. Eso si sólo cobró una media de 1,5 millones limpios al año. Que seguro que pillaba más.
Que igual luego resulta que tiene el resto invertido en bitcoins, acciones de bolsa y startups tecnológicas, viñedos y olivares, y eso es sólo lo declarado a su nombre, pero tiene toda la pinta que el gitano este sólo sabía de invertir (desperdiciar dinero) en coches de lujo y demás ostentaciones y gitanadas, por mucho que las diversas notas de prensa en todos los medios lo traten de austero.
Todo un gran inversor. Mis cojones un clavel. Y luego habrá que ver cuál es el valor de mercado real de esos inmuebles después de la burbuja inmobiliaria, porque atención, ya ves tú, invirtió en activos inmobiliarios de Utrera y de Bormujos. Cágeme en el pecho. Igual son inversiones buenas, pero vamos, que un tío que de verdad maneja capital invierte seguramente mejor. Ni siquiera estamos hablando de la almendra central de Madrid, La Diagonal de Barcelona, Marbella o el centro de Sevilla. Estamos hablando de, atención, Utrera y Bormujos, ciudades con centros financieros y económicos donde se revalorizan todas las propiedades inmobiliarias.