Ya le habría gustado al Kurt Russell tener una Play con el Bloodborne allá en donde estaban aislados, en vez del Spectrum wannabe ese botijero con el juego de ajedrez que se gastaba.
Pero ni con esos desfases tecnológicos ha envejecido mal la peli; por algo es la mejor de Carpenter.
Le daba mucho al whiskey y a saber que veía en la pantalla, eso si, el cabronaso es el perfecto forero aislado.