Interesante estudio sociológico aparecido hoy en La Vanguardia y que confirma las teorías tantas veces expuestas en el foro: hasta las gordas más inmundas se emparejan, mientras que queda un remanente masculino de desecho debido a fealdad no corregida con dinero. Creo que tiene algunas inexactitudes (la brecha es entre los guaperas y el resto, y no entre feos y normales, como dice el artículo), pero en conjunto acierta la diana. Interesante confirmar que los feos son más infelices y con menos autoestima por su constante exposición al rechazo.
Ser feo penaliza a los hombres, no a las mujeres
Por cierto:
Año 2007. Ella 19 (aparentaba 15). Yo 40 (aparentaba 45). En la recepción de los hoteles nos pedían la identificación porque pensaban que era menor. Más de una seguro que pensó en llamar a la policia. Los hombres babeaban de envidia en las terrazas en las que cenábamos. Sus mujeres rechinaban los dientes con odio. Le ofrecieron un par de pruebas como modelo, porque además tenía estilo y se cuidaba (obsérvense potingues de la 1ª foto). Un año después se puso tetas gigantes en su país y estaba todavía más buena (aunque sin esa sensibilidad demoníaca que le hacía perder la cabeza con solo rozarle un pezón).
¿Qué haría en aquellos tiempos el estacas? Se me ocurren posibilidades: apalear inmis (si se follase a alguna como ésta se le quitaba la tontería de cuajo), raparse al uno, hacerse una cartera con los cojones curtidos de la momia de Franco, desprender peste a sobaquina haciendo el saludo romano...