Darkiano rebuznó:
eres "un perdedor", es decir, alguien no apto para la sociedad, que de nuevo, es alguien no apto para las mujeres.
Cada vez que oigo a alguien admirar a los "machos alfa", a los "triunfadores", llamar a alguien "perdedor" o sentirse orgulloso de ser un "buen proveedor", el desprecio por el que lo dice corre a raudales, ahogando toda su verborrea preaprendida, que no dista mucho de la verborrea feminazi, sólo que aplicada a sus sumisos, los "hombres de verdad".
Es por eso mismo que me habréis leído más de una vez decir que hace mucho tiempo que no pienso en mí como un hombre
Esta es otra gilipollez basada en la manipulación del lenguaje que debería ir en el hilo del grimorio, emparentada con el "eres un inmaduro". Porque, del mismo modo que tú no eres capaz de "ponerte en su lugar" ni de "entenderlas", de qué cojones te va a venir a ti a explicar una imbécil que no levanta ni 2xbw en peso muerto lo que es ser un hombre. Pues claro que eres un hombre. Básicamente es una continuación del juego de reglas en el que ellas establecen que pueden hacer de todo, y tú nada (porque un "hombre de verdad" respeta las normas). Y si pretendes salirte de la partida intentarán cargarte con la culpa, diciéndote que eres un medio hombre. Haz la prueba de la infección, diciéndole algo exageradamente bonito a cualquiera que coquetee contigo. Enseguida te dirán "seguro que eso se lo dices a todas", para sembrarte de culpa, si dices "sí" eres un cabrón, si dices "no" eres un mentiroso.
Se ven con derecho a tomar posesión de todo, hasta de la propia definición de hombre. He oído tantas veces lo de "si fueras un hombre de verdad, blao blao blao {ladrillo manipulador}". Y yo, como hombre de mentira, me he dado cuenta de que la gran mayoría justifican su zorrerío de
todo me lo he follado pero sólo te quiero a ti distinguiendo entre dos grupos: hombres rana y el Príncipe, que curiosamente abrió este hilo. Así que en su búsqueda del Príncipe se calzan unas X ranas, donde X tiende a infinito. Por supuesto la culpa de todo eso es de los hombres. De los hombres rana, osea de los buzos, que cuando se quedan con ellas pierden las bombonas, porque lo único que saben hacer las mujeres con una rana es cambiarla cortándole los huevos.
Manipulando el lenguaje haciéndote dudar de tu masculinidad buscan lo de siempre, que te mueras del asco, pero en la calle, levantando sus servicios mientras ellas se quedan cómodamente en casita, pero ahora resulta que reivindican lo injusto que supone que su comodidad vital sea no remunerada y el tostón que es criar a los hijos, porque no sabes lo duro que es llevar una casa, así que sé un hombre de verdad y cuando vuelvas de trabajar once horas fuera de casa, desplazamientos incluídos, colabora a limpiar la casa, que muchas de ellas están agotadas de esperarte aburridas todo el día viendo el sálvame y tocándose el xoxo salvífico. Y no las pagan, si será cabrón el Estado machista.
La devoción por la belleza o la entrega hacia lo que se estima noble o elevado, por mucho que pueda estarse equivocado, el "vivir persuadido" como lo suele referir Magris, son carácteres 100% atribuibles a los hombres. El utilitarismo en el que ellas militan rara vez entiende de estos conceptos, pues ante todo impondrán la pregunta del "para qué sirve". Hay cosas que no sirven para nada, sólo para favorecer la contemplación, producir placer, vivir más en paz con uno mismo en este mundo de mierda. Y si en su día decides no aspirar a volver a formar una pareja estable, porque te cansas de tener que chocar una y otra y otra vez contra un pragmatismo obsceno... trabaja, asciende, ahorra, invierte, métete en negocios, fulanito está ganando a dos manos, ahora es momento de comprar, hazme, dame, cómprame, blaoblaoblao... y prefieres desde entonces algunas de las incertidumbres y riesgos de afrontar una vida en solitario a verte reducido a una máquina proveedora de satisfacción ajena, parece ser que en ese mismo momento se te caen los huevos y tu testosterona en suspensión en sangre decae dramáticamente y dejas automáticamente de ser un hombre de verdad, porque no te prestas a su juego de caprichos estúpidos, sobre todo (en realidad había puesto sobre todo junto porque soy un subnormal) teniendo en cuenta que de no seguirlo enseguida rompen la baraja.
Llevas años demostrando que no eres una res, que tienes inquietudes vitales. Conversa con una y no tardará mucho en decirte que eres un infantil, un inmaduro, un soñador. Todo lo que te distinga de un animal dedicado al sementalismo y la producción, todo lo que te distancie de ser una bestia dedicada a su deleite propio, será identificado por ellas como "infantil" y, por tanto, entras sin saberlo en la dualidad del rechazo. Como tienes inquietudes eres un inmaduro, y ellas sólo se follarían a un "hombre de verdad".
Para follar no quieren a un hombre inteligente, que un hombre inteligente compara, analiza, deduce, ladrillea, se da cuenta de las cosas. Ellas no quieren ser criadas de nadie pero sí tener taxista particular y una mula de carga en el supermercado, un hombre que reaccione por impulsos, que digan "muerde" y él muerda, que le pongan el plato y ahí cague, que se las folle con ganas, pero sólo cuando ellas se dejen. Emborrachadas de poder quieren un súbdito, un adorador de la diosa, un besasuelos que la lleve a la bahía, que les diga vidamía, que se empolle un libro de varios Darkianos de medida con complicados tecnicismos de seducción para follarse a una francesa entre tres. ¿Qué mejor que un puto arrastrado que cumpla órdenes? Es como un mando a distancia, pito tieso, cadera fuera, cadera dentro, har!.
Cuando ya están hastiadas de follar y todo aquél que reniega de su pagafantismo corre el riesgo de caer en el pagapisismo, cuando el coño ya no les da para más... entonces la definición del hombre de verdad cambia, el hombre de verdad es inteligente, alguien adecuado para las largas convesaciones de invierno, alguien que no nombre el sexo en sus largas disquisiciones sobre la batalla de Zama, que no están de ganas. El invierno es estéril, como ellas a los 40, quieren alguien que intuyan que, por su inteligencia, no se va a tirar a otra, porque más le vale no hacerlo.
A las ranas se la chupan y con los príncipes quieren hijos, y qué asco les dan las ranas cuando les conviene. Que las mujeres suelen acomodar su opinión a lo que les conviene es una verdad verdadera, ¿que quieren que las preñes con el bicho? hale, pues les gusta que les muerdas los pezones, ¿que conviene apoyar un proyecto de pareja seria? venga, pues todas putas menos yo, las pollas gordas dan asco, los hombes de verdad no mienten.
Chaqueteras de mierda, y todas putas. Eso es la prostitución, venderse al que más convenga.