Ya se ha hecho el puto amo del barrio el cabrón del Orión. En invierno no sale de madrugada, pero si sale por las tardes o por las mañanas o cuándo puede. El caso es que ayer a las 4 de la tarde no quiso entrar en casa con la mujer, prefirió quedarse en la calle ... asustando perros!!! No lo he visto nunca, pero creo que están todos los perros de la calle acojonaos, ayer me lo confirmó una clienta que tiene un cruce de boxer y también lo tiene acogotao cada vez que sale.
Este verano me lo veo lleno de heridas todas las noches y si no al tiempo.
Asustando perros, pues no creo que llegue lleno de heridas, un día simplemente aparecerá a trozos, como pille a un perro con el instinto depredador algo desarrollado.
Un perro muy domesticado se asustará, es la reacción que tienen en cuanto perciben un ataque o algo que no entienden, dar un brinco y arrimarse al dueño tratando de entender lo que ha pasado.
En el barrio de mi infancia había un perro, un irlandes pelirrojo, que estaba loco perdio y mataba todo bicho viviente que no fuera humano, una cosa así.
En principio parace y se supone que es, una raza elegante y fisna, pero este era un puto salvaje que salia corriendo detrás de los niños a la hora de la merienda para se subieran a la alto de algo con lo cual tenían que tirar el bocadillo, encima se untaba de toda la suciedad que había en un estercolero a varios km, pero el se iba y aparecia a la hora de la merienda lleno de mierda para que su táctica fuera mas efectiva aún.
Pero su especialidad eran los pobres gatos, era una locura, se le ponían los pelos como a un punki y ya no veía nada mas que su objetivo. Normalmente tenían un 50% de posibilidades de sobrevivir, especialmente en espacios pequeños, pero si tenían la mala suerte de estar en un espacio abierto o cometían el error de correr hacia un lugar así, estaban muertos. Los gatos se daban cuenta de que en carrera larga no tenían nada que hacer, así que solo les quedaba la opción de darse la vuelta poner la mirada del tigre y poner pose agresiva, supongo que con la esperanza de que el perro se lo pensara al menos antes de atacar, lo que ocurre es que este no paraba, abría la boca en carrera y lo trincaba por la cabeza, no se que movimiento haría después, pero al segundo el gato estaba inerte. Eso se lo vi hacer un par de veces y la reacción de los gatos era la misma.
Pero no entraban en su menú, los mataba simplemente, luego aparecían sus cadáveres, para que el niño raro del barrio les atara una cuerda a una pata y los enterrase, cuando pasaba un tiempo curándose bajo tierra, tiraba de la cuerda y los sacaba, nunca le pregunte para que lo hacia, lo mismo en aquella época no me parecía tan raro.