NSBM
Veterano
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Tengo una vecina que es retrasada. Bueno, realmente no sé la clase de retraso que posee, únicamente estoy seguro de que es retraso. Es uno de esos tipos de enfermedad que te hace caminar a trompicones y balbucear, hace que las babas se te caigan por las comisuras de los labios. No sé el grado de comprensión de su mente; si es capaz o no de distinguir colores, olores, sabores; si es capaz de mantener una conversación más o menos civilizada aún con todas sus restricciones. Pero sé una verdad inefable: Aún con toda la parafernalia que le ha tocado sufrir en la vida, es una mujer bellísima. Rubia, guapa, de ojos azules y muy buen cuerpo; tanta fortuna que un mal mayor le ha arrebatado.
El caso es que hace tan sólo unas horas, he oído por enésima vez el comentario que toda la gente de los alrededores hace acerca de ella. "Es una pena, con lo guapa que es" -comentan entre susurros.
A la gente no les importa ninguna otra cosa. Les da igual si hubiera llegado a ser un talento inigualable; una maravillosa pintora, o tal vez una arquitecta sin parangón, si nos podría haber iluminado con un maravilloso grupo de música, una dirección cinematográfica incomparable, o si podría haber descubierto la vacuna contra el sidra (vacuna que a ilustres foreros como Folladicto hubiera venido de perlas). Para la suciedad en la que vivimos, todo es banal e infructífero, todo salvo una cosa: la belleza.
Hace tiempo leí sobre quien defendía la idea de que la gente guapa pagara un impuesto adicional como tributo por todas las ventajas que tienen en la vida. Y, aunque es triste, ellos se han buscado la guerra: estoy firmemente de acuerdo con ese propósito.
Hoy por hoy, si eres guapo lo tienes todo. Tienes presencia para cualquier empleo, follas más que nadie, manejas a cualquiera a tu antojo. Puedes trabajar tocándote los huevos posando para revistas de puta mierda de esas que triunfan ahora. Puedes influir positivamente en cualquier superior de tu trabajo o estudios.
Si eres feo, da igual lo que hagas, o cuantas páginas escribas en el gran libro de la historia: al final la gente acabará tomándote como un aburrido más al que recordar vagamente.
Estoy hasta los huevos. Que paguen todos.
¿Algún foro de guapos para hacerle una visita?
El caso es que hace tan sólo unas horas, he oído por enésima vez el comentario que toda la gente de los alrededores hace acerca de ella. "Es una pena, con lo guapa que es" -comentan entre susurros.
A la gente no les importa ninguna otra cosa. Les da igual si hubiera llegado a ser un talento inigualable; una maravillosa pintora, o tal vez una arquitecta sin parangón, si nos podría haber iluminado con un maravilloso grupo de música, una dirección cinematográfica incomparable, o si podría haber descubierto la vacuna contra el sidra (vacuna que a ilustres foreros como Folladicto hubiera venido de perlas). Para la suciedad en la que vivimos, todo es banal e infructífero, todo salvo una cosa: la belleza.
Hace tiempo leí sobre quien defendía la idea de que la gente guapa pagara un impuesto adicional como tributo por todas las ventajas que tienen en la vida. Y, aunque es triste, ellos se han buscado la guerra: estoy firmemente de acuerdo con ese propósito.
Hoy por hoy, si eres guapo lo tienes todo. Tienes presencia para cualquier empleo, follas más que nadie, manejas a cualquiera a tu antojo. Puedes trabajar tocándote los huevos posando para revistas de puta mierda de esas que triunfan ahora. Puedes influir positivamente en cualquier superior de tu trabajo o estudios.
Si eres feo, da igual lo que hagas, o cuantas páginas escribas en el gran libro de la historia: al final la gente acabará tomándote como un aburrido más al que recordar vagamente.
Estoy hasta los huevos. Que paguen todos.
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