Yo el otro día tuve que ir a Fuenlabrada. Y fui con el navegador que me metió en Batán y me tuvo un rato dando vueltas por esas calles que yo no me podía explicar cómo un navegador google dirigido a fuenlabrada me obligaba a meterme en el batán y tirarme 20 min dando vueltas a lo tonto y luego vuelta a carretera extremadura. Y lo que sea eso donde da la salida que pone Batán es un sitio chunguillo. Pero pensé que algún metro cerca tendrían esas gentes por lo menos.
Luego ya al volver no utilicé navegador y fui a ojo, y pasé por una base militar muy bonita. Pero qué gusto volver yo ahí viviendo me muero.
Te metió por batán porque pillaste la A-5 por el túnel de la cuesta de san Vicente y allí a los navegadores se les va la pinza y te sitúan en la superficie en zonas en las que no estás y suelen tardar en volver a dar buenas indicaciones. Fuiste tan elegante que hiciste caso a lo que decía el navegador en vez de seguir lo que la lógica indicaba. Luego pasan cosas de esas como que un coche acabó en el río porque el.navegador les decía que tirasen recto por allí. Pero claro, de quién te vas a fiar, de lo que dice el navegador o de los que ven tus propios ojos?
Yo viví mis primeros 18 años en el pueblo de macs, y lo odio a muerte. Una especie de springfield de los simpons con su alcalde corrupto, su jefe de policía perturbado, su cacique local ( los barral) sus clichés de paletos ( en las conejeras viven los ricos, en las casitas bajas los pobres. A este no te acerques que es el hijo de la no se qué, que le hizo no se qué a no se quién en no se qué año) sus bandas organizadas, a veces pertenecientes a una misma familia y, cuando desarticularon el poblado gitano de los vecinos de benito, a coslada que vinieron. Había odios regionales, los de san Fernando odiaban a los cosladeños y nosotros los mirábamos con pena, como si fuese el hermano tonto de los dos. Yo creo que pensábamos que si ya lo nuestro daba asco, había que ser muy desgraciado para vivir en sanfer.
Os voy a contar una anécdota lol que marcó la infancia a los que vivimos en valleaguado. Atended porque es lo más parecido a historia de dos ciudades que vais a oír:
1990. Resulta que los de valleaguado vivíamos en nuestros pisos pryconsa; castillos de 8 plantas desde los que veíamos todo a nuestro alrededor. Veíamos el aeropuerto, la sierra, los bombarderos que salían de torrejon dirección Irak pasaban rozando nuestros pisos y las personas eran hormiguitas y así acabamos viéndolas, como hormiguitas a las que aplastar. Resulta que en un alarde de locura los vecinos de valleaguado se pusieron de acuerdo con el ayuntamiento para levantar un muro coronado con pinchos que nos separase de los que comúnmente se llamaban " los de las casitas bajas" que no eran, que yo sepa, ni gitanos ni nada, sino simplemente gente que vivía en casas bajas. Total, que se levantó ese muro y la gente de las casas bajas tenía el acceso vedado no solo a valleaguado sino que para ir a cualquier sitio que antes tiraban en línea recta, ahora tendrían que ir bordeando el.ñ barrio. Vivíamos en un gueto infranqueable. Pero la felicidad de los valleagüenses nos duró poco, los de las casitas bajas alquilaron una excavadora y destrozaron el muro. Hicieron un boquete en el mismo utilizando la excavadora a modo de ariete. Era el age of empires en la vida real, amigos.
La noticia corrió como la pólvora. Los chavales fuimos a ver a la excavadora destrozar nuestro amado muro y un padre nos dió un discurso que ni William Wallace. Con el ánimo enardecido, agarramos piedras y todo lo que había alrededor y lo tiramos contra la excavadora y contra las casas bajas, rompiendo cristales, coches y todo. El padre nos animó al pillaje. Nos dijo que nos metiésemos en sus casas a robar todo lo que pudiésemos.
Recuerdo que telemadric llegó bastante antes que la policía, a la que no recuerdo hacer acto de aparición. Creo que si no hubiesen venido las cámaras la cosa hubiera acabado como en Nanking. Pero la cosa acabó con una frase solemne que dijo el conductor de la grúa, subido en ella: todos los muros que levanteis os los vamos a tirar.
Y esta, amigos, es la historia del famoso muro de valleaguado, el cual en 2004 cuando yo me fui de alli, todavía estaba tal y como quedó aquél dia; en parte levantado y con el boquete hecho, con los trozos de piedra por el suelo, como si el suceso hubiese pasado el día anterior.
Me gusta pensar que dejaron allí el muro para que sirva de recordatorio a las generaciones venideras de lo que allí ocurrió esos días. Para que ese acto de puro clasismo y racismo no quede en el olvido.
Pero no, seguramente lo dejaron allí porque aunque los de los pisos de ocho plantas íbamos de dignos, no teníamos un puto duro nadie y no habría dinero para recoger los escombros.
Pero, y lo bien que nos sentimos levantando un muro para poder sentirnos alguien? A lo mejor era la primera vez que aquellos inmigrantes de toledo y Extremadura se sentían superiores a alguien y bien que se lo.quisieron hacer saber.
Historias del Madrid profundo, amigos.