No entiendes las cosas, mongolo.
Ya lo he explicado alguna vez.
Lo que era típico en 1995:
"Juan y Maribel se han liado. El cabron de Juan la ha abandonado después de una noche. La utilizó. La usó. Maribel lo ha llamado llorando. Vaya hijo de puta".
Lo que es típico hoy:
"Juan y Maribel se han liado. Maribel ha decidido que no quiere nada más con él porque es libre de decidir. El chalado de Juan la acosa llorando por teléfono. Tiene que denunciarlo a la policia".
El entorno y las normas sociales que rigen a cada momento nos condicionan. Cuando hace 30 años el perro de otro te molestaba, lo mandabas a la mierda a él y al dueño y nada ocurría. Si lo haces hoy todo el mundo se te tirara encima, porque los perros son Reyes en nuestra sociedad actual.
Las mujeres hoy no sienten ninguna presión por dejar a un tío cuando se cansan. Precisamente porque el relato es ese. Tú puedes hacer lo que quieras. Todo lo que hagas está bien hecho. Tú eres la ganadora del conflicto pase lo que pase hagas lo que hagas.
La chica a la que el otro día chute de mi vida tardó cero coma cero en soltarme el "ahora me dejas tirada". "Tú me has engañado". Y no hubo más porque ipso facto la bloqueé de todo.
Si un tío en la situación inversa conduce por esos derroteros cuando le dejan, tiene que ir con mucho cuidado. Porque se puede llevar una mala sorpresa en forma de visita de
@topbox a su casa.
Eso de que todas lo pasan muy mal que no lo olvidan, pues es una afirmación que sale de tus cojones.
Hay hombres que también lo pasan mal.
Y que ellas lo pasen mal o menos mal o no mal, va a depender de muchas cosas. De cómo era el tío, de cuánto llevaban, de cómo era la relación, de cuanto interés despierta ella entre los hombres de alta calidad, del carácter que ella tiene...
Lo único que sucede es que ellas están menos acostumbradas al no que al sí. Les puede resultar más inesperado. Es infinitamente más normal que un hombre no sea correspondido a un match en Tinder que a la inversa.