naxo
Muerto por dentro+
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A quienes no viven en Sevilla esta noticia seguramente ni les vaya ni les venga, pero allí es algo que se rumiaba desde hacía meses, casi años, y por fin se ha confirmado.
El cargo de subdelegado del Gobierno, de libre designación, pasa de Carlos Toscano, flamante jubilado, a Francisco Toscano, su hijo, ni más menos. Y no solo eso, Francisco Toscano es teniente de alcalde Dos Hermanas, de donde es alcalde su tío, casualidac, desde hace 39 años.
¿No es maravilloso ver como una estirpe familiar sigue repartiéndose cargos mientras el populacho aplaude por lo bien que lo hacen los dueños del cortijo? Porque esto es lo que ha sido Andalucía durante 40 años, familiares actuando como clanes repartiéndose cargos, puestos y posiciones a los que solo ellos pueden optar, porque son ellos quienes ponen las reglas para acceder. El pueblo podrá mirar como comen, pero nunca sentarse en su mesa, mientras les dicen que los señoritos son otros, que no son ellos.
Y seguirá siendo así por muchos años más mientras les dejen, y se seguirán protegiendo esos clanes unos a otros, creando dinastías que hereden cargos y puestos.
Ahora es cuando se llena esto de "si, pero..." y "fulano más".
La Subdelegación del Gobierno en Sevilla pasa de padre a hijo
Un cargo que pasa de padre a hijo. Es lo que ha ocurrido con la Subdelegación del Gobierno en Sevilla, que ocupará el socialista Francisco Toscano Rodero, a quien este viernes...
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El cargo de subdelegado del Gobierno, de libre designación, pasa de Carlos Toscano, flamante jubilado, a Francisco Toscano, su hijo, ni más menos. Y no solo eso, Francisco Toscano es teniente de alcalde Dos Hermanas, de donde es alcalde su tío, casualidac, desde hace 39 años.
¿No es maravilloso ver como una estirpe familiar sigue repartiéndose cargos mientras el populacho aplaude por lo bien que lo hacen los dueños del cortijo? Porque esto es lo que ha sido Andalucía durante 40 años, familiares actuando como clanes repartiéndose cargos, puestos y posiciones a los que solo ellos pueden optar, porque son ellos quienes ponen las reglas para acceder. El pueblo podrá mirar como comen, pero nunca sentarse en su mesa, mientras les dicen que los señoritos son otros, que no son ellos.
Y seguirá siendo así por muchos años más mientras les dejen, y se seguirán protegiendo esos clanes unos a otros, creando dinastías que hereden cargos y puestos.
Ahora es cuando se llena esto de "si, pero..." y "fulano más".