Con otras cosas no estaré de acuerdo, pero ahí opino exactamente igual. Ellas se lo buscan.
Yo no opino que sean violentos desde el inicio de la relación, y lo explico:
1- Al principio el fustigador en cuestión tiene que conseguir el primer objetivo que es conquistar a su princesa. Hará cuantas artimañas ñoñas estén en su mano, será el príncipe que ella busca, la tratara bien, hasta conseguir que de ella nazca un "sentimiento" que la ate a el.
2-Luego viene la fase de hijo putismo mezclado con momentos ñoños. Es hijo de puta con ella pero luego aparece un con un regalito pidiendo disculpas. Está fase es esencial, pues hace que la dependencia de la mujer aumente, consigue que se enamore más de el a base de putada-regalo. Ella empieza a entrar en un estado de alienación, y no se da cuenta de que esto es el inicio de lo que vendrá después.
3-Luego viene la fase de minamiento de moral. El la descalificara constantemente, le hará ver en todo momento que es inferior, que no vale una mierda, hasta que ella tome conciencia de ello. Con esta fase lo que pretende el maltratador es atarla mucho más, aumentar su estado de alienación y conseguir moldearla a su antojo.
4-Esta es la fase plena del maltrato, aquí ya le pega palizas, le grita constantemente, le obliga, le manda, le ordena, la mujer no es capaz de reaccionar ante eso y solo sufre al hijo de puta en cuestión. Si se llega a esta fase es muy difícil salir pero se puede conseguir.
El tío habiendo realizado todo ese trabajo, es normal que no soporte que la mujer rehaga su vida con otro, porque es como si pensara que todo el trabajo se ha ido a la mierda, por eso clama venganza.