Respect.

Supongo que tendrá todo el merchandising de Telepicsa de la última década. Hijo de puta.
Lo peor al salir del pozo es darte cuenta que no queda gran cosa, salvo la contemplación de los cielos y de lo intangible. Todo lo demás, el Tedio, Los Otros. Vamos, como en Trainspotting 2.
Nada. Tiraba de la típica carta. Mitad barbacoa, mitad especial de la casa, que ya no existe. Lo de cliente preferente me lo notificaron por correo, en plan "cuando haga su pedido, indique el siguiente código".
Sobre el horror que queda atrás (siempre subrayo que yo no logré escapar: me abrieron la puerta y me dejaron ir), es cierto que se te queda la mirada de los mil metros (al menos a mi), como si fueras un veterano de la guerra de Corea, o algo así. El mundo ya no es igual. Has visto a LOL actuar en toda su gloria, has visto todos tus esfuerzos borrados de un plumazo, la injusticia y la miseria triunfar. Sabes, SABES, que eres insignificante frente a las fuerzas del puto cosmos. Pero han dejado la puerta abierta, para ver qué haces ahora. Por diversión, supongo. Así que te tomas esa cerveza, ese café, y te quedas mirando las nubes, las copas de los árboles, los pisos altos. Como una puñetera vaca pastando.
Sin embargo, yo no comparto su visión nihilista de la vida (si es que es esa, a mi me lo parece), amigo Cimmerio. Conservo ilusiones, disfruto de la vida tanto como puedo. Por el rabillo del ojo a veces parece surgir una sombra. Sabes lo que hay tras el velo, y que puede volver a por ti, o a por cualquiera que te importe, en cualquier momento.
Pero está el comercio. Está el bebercio. Y está el follercio. Y está LOL, que todo lo puede, y que en el fondo nos ama. Todo lo hace por nosotros. Algún día, hacía atrás, en su regazo, lo entenderemos.