Porque, como ya he dicho, realmente no me apetece, no lo suficiente como para pagar por ello. E incluso aunque fuera gratis porque me invitara otro, el solo concepto de pagar por lo que otros obtienen de gratis me repele, me supone un agravio comparativo imposible de ignorar.
Para mi a estas alturas el único valor masculino demostrable es llegar al punto de calidad como macho en el que son ellas las que se ponen a tiro, en el que eres tú el que tienes varias opciones entre las que elegir (no digo elegir las que tú quisieras, eso ya es una fantasía, simplemente tener opciones suficientes como para no aguantarle tonterías a ninguna).
Todo lo que no sea ese nivel me parece una indignidad. Punto.
Edito: otra cosa es que yo sea capaz de llegar a ese nivel, que a día de hoy no me veo. Y me dirán que me pongo a mi mismo en un callejón sin salida. Pues si, yo soy así.