Era una inútil que se creía que eso era el patio de su cortijo donde después de cenar el servicio recoge la mesa y con una copa en la mano los invitados hablaban de los divido y lo humano. Menuda payasa, con ese tonito de regañina, con ese tonito de no consiento que se sirva la mesa sin estar bien puestos los cubiertos, con ese tonito de chinchada. Típica/tópica ricachona que está siempre con ese gesto de estar oliendo un pedo silencioso.
No aportaba nada en absoluto al parlamento, iba a armar alboroto, no proponía alternativas, solo sabía criticar con mala baba lo que hacen los demás. Que por cierto, eso es un don que ya he visto a más de uno, gente que critican y critican con una habilidad acojonante, pero de ahí no salen.
Era una copia de Aznar, ¿nadie se había dado cuenta que hablaba con el mismo tono y decía las mismas gilipolleces que el otro?
Mira, cigüeña, ahí estabas para levantar España, puta, no para vomitar tu mierda sin que nadie de contradijese como te pasa en tu casa, marquesita rancia. Esa de política no tenía nada, era una puta mierda estirada y cuellilarga con anteojeras ideológicas. Otra contertulia metida a política, tenía más odio hacia los piojosos de Podemos que ganas de hacer algo por la sociedad.
Bien destituida está, ella y el ginebras. Ambos la misma mierda.