Slowhand
Freak
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- 17 Ene 2010
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Últimamente me veo presionado por una situación un tanto extraña. Noto como la presión va doblegando mi templanza por lo absurdo de la situación, hasta el punto de tenerme miedo a mí mismo por ser tan gilipollas.
Desde hace meses vengo manteniendo una relación con una chica. Una relación que por momentos va surcando las aguas de lo que podría considerarse algo serio, entre tanto que la seriedad se torna en distancia, sobre todo por mi parte. Lo que me asusta de todo esto es que en ambos territorios me siento como en casa, tranquilo y sosegado hasta unos límites que me hacen sospechar. Soy feliz estando con ella y también lo soy cuando no tengo su presencia rondando mis dominios. Y qué queréis que os diga, me parece algo absurdo. Me parece absurdo ser feliz en la proximidad y en la distancia cuando la causa de esa felicidad es una misma cosa; ella. Me parece absurdo ser feliz por estar con ella y por estar sin ella. Sí, ya lo sé, soy un puto tarado, un adolescente que aun no ha madurado, un triste que no sabe nada de la vida, y el objeto de deseo de cualquier zorrupia de aviesas intenciones.
¿Alguien ha sentido algo así de extraño? Me encantaría leer como me insultáis y profanáis mi tierna y edulcorada visión del mundo, pero agradecería que alguien me dijese que no estoy solo, que esto ha pasado antes, que sigue pasando y pasará, vaya que si pasará.
Había escrito un buen ladrillo pero se fue la luz :(
Desde hace meses vengo manteniendo una relación con una chica. Una relación que por momentos va surcando las aguas de lo que podría considerarse algo serio, entre tanto que la seriedad se torna en distancia, sobre todo por mi parte. Lo que me asusta de todo esto es que en ambos territorios me siento como en casa, tranquilo y sosegado hasta unos límites que me hacen sospechar. Soy feliz estando con ella y también lo soy cuando no tengo su presencia rondando mis dominios. Y qué queréis que os diga, me parece algo absurdo. Me parece absurdo ser feliz en la proximidad y en la distancia cuando la causa de esa felicidad es una misma cosa; ella. Me parece absurdo ser feliz por estar con ella y por estar sin ella. Sí, ya lo sé, soy un puto tarado, un adolescente que aun no ha madurado, un triste que no sabe nada de la vida, y el objeto de deseo de cualquier zorrupia de aviesas intenciones.
¿Alguien ha sentido algo así de extraño? Me encantaría leer como me insultáis y profanáis mi tierna y edulcorada visión del mundo, pero agradecería que alguien me dijese que no estoy solo, que esto ha pasado antes, que sigue pasando y pasará, vaya que si pasará.
Había escrito un buen ladrillo pero se fue la luz :(