Danita
Te la come por un plato de lentejas
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- 15 Ago 2007
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Sábana (o deberíamos decir Sábano, por estos sitios nunca se sabe) pensó:
“Voy a entrar en este foro de cutripandis lerdos y les voy a abrir un post con una teoría más sobada que el culo de Bellmalena y más simple que el mecanismo de una cerilla, luego les pediré que la analicen que como son tan gilis seguro que tragan y aquí quedo yo como la reina del cotarro. Ama me dirán y me adorarán como al dios Sol je je je”.
Pero ay amigo, ay fatal coincidencia, ay sino nefasto, ay devenir obtuso, resulta que, contra todo pronóstico, en el foro ( en ese cutre foro de pringaos), había personas que tenían más de una neurona haciendo eco en la cavidad craneal y le dijeron lo que no quería oír, que había escrito una obviedad como una casa y que no valía la pena ni analizarla por lo sumamente pobre y carente de interés que era . Quedó en evidencia, la dejaron con el pompis al aire pero ella ( o él), herida en su inmenso ego, siguió dale que dale en su púlpito de “sapiencia”.
Humildad reina mora que desde luego, si piensas que la ciencia y la humanidad avanzan apoyándose en “reflexiones” como la tuya, la necesitas en grandes dosis.
“Voy a entrar en este foro de cutripandis lerdos y les voy a abrir un post con una teoría más sobada que el culo de Bellmalena y más simple que el mecanismo de una cerilla, luego les pediré que la analicen que como son tan gilis seguro que tragan y aquí quedo yo como la reina del cotarro. Ama me dirán y me adorarán como al dios Sol je je je”.
Pero ay amigo, ay fatal coincidencia, ay sino nefasto, ay devenir obtuso, resulta que, contra todo pronóstico, en el foro ( en ese cutre foro de pringaos), había personas que tenían más de una neurona haciendo eco en la cavidad craneal y le dijeron lo que no quería oír, que había escrito una obviedad como una casa y que no valía la pena ni analizarla por lo sumamente pobre y carente de interés que era . Quedó en evidencia, la dejaron con el pompis al aire pero ella ( o él), herida en su inmenso ego, siguió dale que dale en su púlpito de “sapiencia”.
Humildad reina mora que desde luego, si piensas que la ciencia y la humanidad avanzan apoyándose en “reflexiones” como la tuya, la necesitas en grandes dosis.