Conozco a alguna en esa situación y, sinceramente, no me da ninguna pena. Es como el que, aprovechando el tema, se mete a torear y luego se queja porque le ha empitonado el toro. No haber bajado al ruedo cuando estaba el toro, no te jode. Otros nos quedamos en la barrera, aguantando los insultos y los desprecios (hay que meterse, que los pisos no bajan nunca; el alquiler es tirar el dinero -ni recuerdo las veces que me lo dijo mi suegra :pringui -; gástatelo, que para algo lo ganas), y hemos bajado cuando ya salió por toriles, y podemos, peor que mejor, pero podemos, mirar al que está en el suelo desangrándose y decirle: "I told you".
Si solamente hubiera habido un poco de cabeza y sensatez en esta mierda de país, otro gallo cantaría.
Pido demasiado, lo sé.
Usted con este punto es torticero -perdone por la expresión-, pero tiene parte de razón, personalmente pienso que para meterse en una deuda como una una hipoteca a treinta años hay que pensarselo mucho y luego decir que no, sobre todo si se lleva la mitad del sueldo y más.
Quién se metió tiene parte de culpa en su desdicha, y la otra parte quién le hizo el estudio económico -el banco- y aceptó que un señor con una nomina de mil leuros decidió que podía pagar una hipoteca de setecientos leuros durante treinta años.
Lo que hemos estado viviendo ha sido una estafa de grandes magnitudes, jugaron con la buena fe de la gente: trabajaban, ganaban dinero y buscaban un futuro mejor.
Ahora, por si fuera poco, un banquero, que mintió, mandó por eso a tres personas a la carcel -que se la comieron entera-,
don Alfredo Saénz -mano derecha de Botin- es amnistiado. Atrás quedan quienes se "se comieron el marrón", claro está, si entraron a la carcel algo hicieron. Como
Mario Conde, fue enjuiciado, condenado y purgó sus penas en el talego, estuvo en la carcel, algo hizo y por ello llevará la marca de caín el resto de su vida. ¿Quién proporcionó las pruebas culpatorias? ¿no lo sabe?
don Alfredo Saénz -mano derecha de Botin-, de profesión mentiroso indolente, se le pesca en la mentira, se le enjuicia, es declarado culpable, es amnistiado; pero no una amnistia para no entrar en la carcel, no, una amnistia que abochorna y nos deja desarmados a los ciudadanos: siga usted en sus trapicheos bancarios, siga desahuciando a las pobres gentes, siga usted mintiendo, banquero mentiroso con dolo, que aquí estamos los politicos -esta vez Zp- para amnistiarle delante de toda esta borregada de ciudadanía que no se entera, que no quiere enterarse, o que si se entera mira para otra parte.
Alfredo Saénz diga lo que diga el gobierno y Botin, está inhabilitado para seguir de banquero, donde mejor puede estar es entre rejas por el bien de la ciudadanía. Con esta amnistia
Zp nos abochorna, de nuevo, a todos los que creemos en la democracia y en la justicia.
Saludetes.