Me gusta más enfocarlo desde el punto de vista de estrategia militar, pero vale, arranco con el ladrillo.
Tengo en cuenta los principales
factores:
- Vulnerabilidad femenina. Mayor cuanto más lejos se encuentren de lugares y momentos de ocio (como discotecas). Esto es, entre semana y en el trabajo, universidad, a la hora de comer, en el super, en la misma calle...
- Predisposición femenina. Con el tiempo se aprende a ver cuando te están prestando atención y cuando pasan de tu culo.
- Porcentaje masculino. Más dificultad cuantos más maromos haya. Sean más o menos torpes o hábiles, ellas ya se sienten lo bastante atendidas como para permitirse rechazar al que les apetezca, porque sí.
- Porcentaje de machos ligones. Más dificultad porque hacen sombra. Aquí habría que distinguir a los que te levantarían suciamente a la moza y los que tienen novia (y por tanto, ayudan a atraer a más hembras). Los segundos son muy útiles en la discoteca, te ahorras romper el hielo (son ellas las que vienen) y no les queda otra que retirarse para evitar la tentación de cornear a sus respectivas.
Escenarios:
- Internet (chat). Imposible. Demasiados garrulos, pagafantas y arrastraos con ADSL hacen imposible tirar la caña. Súmese además la tontería de las chicas y los graciosos gilipollas de siempre.
- Internet (redes sociales). Complejo. Al baboseo de la competencia masculina, añádase la rápida capacidad de análisis de un perfil a ojos de una hembra. Nos sacarán todos los defectos en cero coma. Tras casi dos años de permanencia en Tuenti, el resultado ha sido pésimo y me he borrado completamente hace bien poco.
- Internet (baddo / meetic). No he probado ninguno de los dos. El segundo me daría buenos resultados, según me dijo mi follamiga MILF. En el aire...
- Discotecas / ocio nocturno: Muy complejo. Campo de nabos, chicas endiosadas, colegas que venderían a su madre por robarte a la presa... sin duda el peor de todos. No obstante, puede servir para promoción propia mientras tengas claro que es más probable que muerdas otro día, en otro escenario. Mucha paciencia.
- Cenas/comidas/cafés de amigos/conocidos (en plan tranquilo). Si tienes la suerte de que te presenten chicas nuevas, este es uno de los mejores entornos para lanzar las redes. Como es un ambiente relajado y distendido, permite la conversación y autopromoción (de forma discreta, eso sí).
- Trabajo. Aquí es donde estoy en mi salsa, hago lo que me gusta, los compañeros son estupendos y encima me pagan. Me concentro en mis tareas y procuro no distraerme con las compañeras (que son bastantes, atractivas, cultas y trabajadoras). Me he planteado tirarle la caña a alguna, pero la idea de que eso perjudique mi puesto me echa para atrás.
Tácticas:
- Hacerme visible, pero no siempre disponible. Capacitado pero tampoco altanero. Divertido pero a la vez calmado. Gracioso pero no payaso. Que me vean moverme por aquí, por allá y dedicar un poco de tiempo a cada una. No me caso con nadie, así que más vale que se espabilen si quieren mis atenciones.
- Hacerme invisible en Internet. Si en el campo profesional, la visibilidad en Internet te suma puntos, en el campo del ligoteo te los resta. Cualquier referencia mínimamente friki, técnica o no-metrosexual, puede joderte los planes en cero coma. Aparte de las conclusiones que se sacan de tus viajes, tus amigos, la gente que te rodea, etc.
En mi caso, el misterio me ha dado mejores resultados que mostrar el escaparate de mi vida.
- Viajar. A los hechos me remito cuando digo que siempre he tenido mejores resultados cuando salgo de mi tierra.
Resultados:
- Sigo sin pillar cacho, vaya mierda de año llevo...
Necesito cambiar de aires.
Pero:
- Autorespeto.
- Autorreflexión, observación y aprendizaje del comportamiento femenino.
- Empatía. Casi puedo leer su mente como si fuera un libro abierto. Relacionado con el punto anterior.
- Noto que atraigo miradas femeninas, aunque principalmente en el trabajo. Cuando les presto la atención justa y con cuentagotas.
- Paciencia. Mucha.