femme_fatale rebuznó:
- Si te enrollas con alguno y se pone pesado/se enrolla de puta pena/le huele el aliento/mil razones más, haces señales a tus amigas para que te lo quiten de encima cuanto antes.
La primera vez que se marchó hubiese sido posible esta respuesta,
así que esperar en ese caso puede ser recomendable.
Pero ya la segunda..., debiste sonreír al orco y acompañar a la amiga a su
grupete. No debiste soltar tu presa por ningún motivo... esa parte es la
que no entiendo ¿porque dejan que les saquen tan fácil "la comida de la
boca"? Mientras ella habla con su orcamiga se le puede acariciar la
espalda, de vez en cuando besarle el cuello, susurrarle algo al oído y
diplomáticamente sonreírle a la bestia de Mordor, la cual tendrá su piel
trastocada en un sutil verde-envidia y de la cual no nos conviene
enemistarnos sino someterla. El soportar la orcamiga es una prueba que
da puntos a la vista de la fémina, que si no valorase a la pequeña bestia o
sintiese pena por ella no accedería a sus demandas; el insistir a pesar de
este obstáculo seguro mostrará que tenemos interés en ella y eso es algo
que a muchas mujeres les gusta "vernos interesados en ellas".
Finalmente la desesperación de follar esa noche puede arruinar todo y en
definitiva no follar nunca con la mujer, paciencia y no soltar ni debajo del
agua la presa; el primer objetivo debe ser tener el teléfono de ella así
pase lo que pase al otro día se la puede contactar e invitar a salir sin la
presencia del maldito orco.
Algunas mujeres no cederan al impulso de irse contigo por estar
expuestas a la vista del grupo que la acompaño, a otras esto no les
interesa un carajo; pero si era del primer tipo, entonces el encontrarse
otro día es una de las pocas alternativas que quedan.
Pero si las pretensiones es no tener nunca un obstáculo..... la vida no es
así de facil (a veces sí).
Otra opción, luego de haberla dejado ir, era acercarte tú a donde ella
estaba, tomarla y decirle que se fuesen a algún lugar libre de
interrupciones y matizar la declaración con mentiras o verdades varias.
En definitiva ella te miraba, luego descuidadamente te rozó, se liaron, te la
robaron, ella volvió, te la volvieron a robar... lo que yo veo es que ella
tomó siempre la iniciativa de acercarse y un puto orco te venció, pero no
tomaste acciones al respecto. E insisto, el obtener lo antes posible su
número telefónico es fundamental, esa noche se puede ser vencido por
el orco o pasar de realizar el esfuerzo de seguirle el jueguito a tremenda
bestia, pero al otro día se tiene la posibilidad de contactar exclusivamente
con quien nos interesa... aunque siempre está la posibilidad de la
conferencia telefónica entre tres, por si extrañas al orco.