ruben_clv rebuznó:
Pues ojo que esta tía encaja contigo. Es de las filósofas como tú. Mira lo que escribió:____Hoy, tras la frustración de no poder expresar, plasmar, aquello que se siente, en un intento fracasado de escritura, he necesitado confesárselo - quizá exigirle responsabilidades- a alguien. No a cualquiera.Entonces cojo mi bicicleta, y salgo con el mapa de un lugar en la mente y en el corazón. Seis de la tarde, el Octubre más caluroso, una fuerte pendiente, el trayecto que siempre había imaginado. Así llego a aquel edificio de ideas y de papeles que tanto amo. Entro en la facultad de filosofía, ya son las siete y no hay nadie en la parte baja, entre la luz y la oscuridad me sitúo allá donde se imparten las clases, también allá donde los filósofos custodian el pasillo. Solo con la compañía de estos establezco un dialogo, uno a uno me sitúo frente a ellos y los miro desde el interior, como aquel que entrado en la iglesia se dirige directo a la cruz: Ayer, Popper, Ortega y Gasset, Beauvoir, Hannah Arednt; Heidegger en la pared frontal, observándolos a todos; llega Nietzsche, aquí todo cambia, lo han querido representar con su busto, no hay fotografía, es la sentencia; me encuentro a Kant, ante él me siento y lo contemplo (qué menos podría merecer): ''mi querido Kant, tanto te he admirado, incluso te creí... entonces pienso: jamás saliste de Königsberg, ¿Cómo pretendías fundir la verdad con la realidad?'' ¿Por qué no saliste como Herder?, entiendo: porque sino no seria Kant, y no te dignificarían tus aporías; continúo descendiendo, allí está Descartes ¿Qué certeza nos ofreciste? me siento reflexiva, entonces me doy la vuelta para mirar por la ventana - esperando así encontrar aquel momento de claridad- pero en ese giro me encuentro la osadía del comisario de tal exposicion: Hölderlin está situado en la misma pared que Heidegger (sólo ellos se acompañan) y su mirada se guía hacia Descartes, mientras que éste tiene la suya fija en los libros (su método) ¿hubiera sabido como devolver la mirada? creo que jamás pudo siquiera imaginar que un día sería así observado, ¿Cómo entender por entonces que el Poetizar podría plantar cara al Pensar?. Enseguida llega Sócrates, ¿Y los medievales?... Han desaparecido, que pena tan grande, que hecho tan intolerable. Me sitúo ante ''La muerte de Sócrates'' allí comenzó todo, nuestro occidente potente, nuestro occidente frágil, nuestro pensar.A solas, ante ellos, sintiendo ya la despedida, me declaro culpable e inocente por tradición que han pensado y que ahora nos penetra y nos otorga esta histórica existencia._____Además joven, guapa y la tienes relativamente cerca. En Murcia. No sé a que esperas. Podría haber boda y todo gracias a mí.