Sí, pierdes una mañana haciendo papeles si te roban, como la pierdes si vas al gimnasio a desgastar energía, que es como si estuvieras dando vueltas por la calle para renovar documentación.
También es cierto que la cantidad de dinero que te roben es clave. No es lo mismo 10 que 150 ni 30 que 250. Pero es que aparte de no poder estar disfrutando tú de ese dinero, la sensación que lo empeora y agrava todo más todavía es que además hay un gilipollas que se dedica a pincear carteras que es el que sí va a disfrutar de ese dinero tuyo ganado con esfuerzo.