CENTROS COMERCIALES (Con Franco, el sábado te podías quedar en casa)

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Yo solía ir al CC Berceo al cine, me veía 2 o 3 pelis con la tarjeta Yelmo (3 €), y luego a comerme un par de pinchos de tortilla rellena a Calenda.(muy recomendables)
Los sábados tarde aquello está petao, pero el nivel de chonis, pijas, putas en general es bastante alto, se ponen sus mejores galas y suelen ir con el pagafantas de turno que les lleva las bolsas imaginando el polvo (imaginario) que va a echar después.
 
Me lo imagino en esos pasillos, de primark a alguna juguetería para el nuevo capricho de mi sobrino, mientras mi sobrina patalea por alguna perreta estúpida que le haya dado, impasible a la diplomacia de mi cuñada que con un "te voy a meter una ostia como no dejes de llorar" intenta poner fin al berrinche de la criatura.

Eh, Semete, ¿tienes sobrinas?
Sobrinas no se, pero atendiendo al texto de semete podemos suponer que una sobrina fijo.
 
Eh, Semete, ¿tienes sobrinas?

No, he usado la figura de mi sobrina porque en realidad es un amigo con bigote al que visto de niña pequeña. Si es que te metía con el dorso de la mano por preguntar tontadas.
 
Por ese párrafo mereces que te ejecuten de la forma mas dolorosa posible.

Eres la síntesis del beta mas arrastrado que pueda existir.

La próxima vez que tu mujer diga de ir a un centro comercial, ponle un poco de cojones a la vida y le dices que no, que no te gusta y que no vas a ir, que si no le parece bien que se vaya a tomar porculo.

Hijo de puta.


Enviado desde Mordor con un Tam Tam

Hombre, es que elegir entre follar poco o no follar nada. Yo prefiero quedarme con lo de poco.
 
Oye, perdona si no me he enterado bien, joder, menudo carácter tiene el señorito.

Años, descripción física, tacto de su piel, olor de pelo, gestos más perturbadores. Cuéntate alguna anécdota, como cuando no hay nadie en el salón y la llamas para que traiga un cuaderno y un lápiz para que el tito semete dibujo guarreridas y aprovechas para decirle que tienes un muñeco en la entrepierna que se mueve si le tocas. O cuando le haces el juego ese de ir con los dedos índice y corazón como si fuese un hombre andando que recorre su cuerpo y se tropieza en su cosita, o da vueltas en círculo por la zona de sus pezones. O esas veces que la sientas en tu regazo y mueves las piernas para jugar al caballito, eh, el caballito, Semete.
 
Oye, perdona si no me he enterado bien, joder, menudo carácter tiene el señorito.

Años, descripción física, tacto de su piel, olor de pelo, gestos más perturbadores. Cuéntate alguna anécdota, como cuando no hay nadie en el salón y la llamas para que traiga un cuaderno y un lápiz para que el tito semete dibujo guarreridas y aprovechas para decirle que tienes un muñeco en la entrepierna que se mueve si le tocas. O cuando le haces el juego ese de ir con los dedos índice y corazón como si fuese un hombre andando que recorre su cuerpo y se tropieza en su cosita, o da vueltas en círculo por la zona de sus pezones. O esas veces que la sientas en tu regazo y mueves las piernas para jugar al caballito, eh, el caballito, Semete.

¿Está buscando novia, hamijo Verrugueño?:1
 
Hombre, es que elegir entre follar poco o no follar nada. Yo prefiero quedarme con lo de poco.

El debate no es si poco o nada, porque el poco se puede convertir en nada de un día para otro.

La pregunta es follar poco a cambio de qué y si compensa. Ya te contesto yo: no.
 
Mientras no me falten 50 euros en el bolsillo no. ¿por?

¿tienes sobrinas tú?
 
Esos sitios son para mujeres y maricones.
Para zombis de Telecinco. Sociedad de plástico. Relaciones de usar y tirar. Irreflexión y billetes deseosos de cambiar de dueño. La matrics hecha periferia. Cafecito, montadito, palomitas y palomino. Palomos cojos y pa lomos, los de los Sísifos de poliéster y chupa de polipiel con peinado de futbolista trisómico.
Os dejo, que me voy al centro comercial, que luego se llena de gente. ¡Qué asco! Todos iguales.
 
Última edición:
Que voy a dar, si a mi sobrino de diez años ya le he pedido prestada la play 4 que ni mira para ella :face:.

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El rancho del Foster Hollywood es infame

Bueno Loranca, Parquesur, y Xanadú, son la una trilogía temible de centros comerciales tomados por lo más lumpen de los infraseres, tres estrellas de la muerte, resumidas en la guerra de los payos, el gitano contraataca y el retorno del cale.
Venga, Torquemada, no nos vengas con tontadas. Todos los que te leemos sabemos perfectamente que tú te tiras todos los sábados y fiestas de guardar en un centro comercial arrastrado por tu mujer, y que tu conocimiento de estos centros viene dado por la experiencia de primera mano que supone el ir cada finde a uno de ellos. A buen seguro tengo que no hay centro comercial en el cinturón de escoria en el que vives que no hayas pisado, que no te hayas recorrido desde el último sótano del parking hasta la terraza, en el que no hayas pasado una tarde noche y cuyas franquicias de comida de mierda te hayan servido de marco idóneo para una cena en pareja con tu señora.

Tú eres el hermano de semete, el marido silente que va detrás de la mujer, el hombre que espera en la puerta del Monsoon con un montón de bolsas, el que sale a la puerta cada hora a echar un cigarro tras un "te espero fuera", el tío al que la mujer le dice "quédate aquí mientras entro a ver y una cosa y no te vayas a ningún lado", el que recibe miradas de desaprobación si osa abrir la boca ante la enésima visita al Calzedonia, el que no rechista, el que en las reuniones de parejas asiente mientras la mujer relata la visita al centro comercial como si fuera el súmmum de la aventura y todos lo sabemos. Estoy seguro de que te conoces de memoria dónde está el Zara, el Bershka, el Accesorize y el Foster's en cada uno de ellos, que serías capaz de dibujar de memoria los planos de cada centro comercial getafense, mostoleño y alcorconero desde 1998, y que ante cualquiera de sus locales podrías decir "aquí había un Pimkie, luego un Zara, luego un Massimo Dutti", y que el día que tu mujer dice "Hoy vamos al Las Rozas Village" es la cúspide de tus periplos comerciales.
 
Por ese párrafo mereces que te ejecuten de la forma mas dolorosa posible.

Eres la síntesis del beta mas arrastrado que pueda existir.

La próxima vez que tu mujer diga de ir a un centro comercial, ponle un poco de cojones a la vida y le dices que no, que no te gusta y que no vas a ir, que si no le parece bien que se vaya a tomar porculo.

Hijo de puta.


Enviado desde Mordor con un Tam Tam

Tienes razón,se debería de cambiar el titulo al hilo,ahí dejo el mío
Soy un calzonazos (La puta de mi mujer,me oblga ir a un centro comercial)
 
Tienes razón,se debería de cambiar el titulo al hilo,ahí dejo el mío
Soy un calzonazos (La puta de mi mujer,me oblga ir a un centro comercial)

Pues en Alicante hay buenos CC. Yo siempre hacía la misma rutina ...
Mañana- playa (San Juan)
Tarde- Centro Comercial. (cine si había estreno)
Noche- Casino- (l-v)
Findes- Garitos y discos.
Madrugada- D´Angelo (cuando estaba abierto)
Eran buenas vacaciones ...:103
 
Venga, Torquemada, no nos vengas con tontadas. Todos los que te leemos sabemos perfectamente que tú te tiras todos los sábados y fiestas de guardar en un centro comercial arrastrado por tu mujer, y que tu conocimiento de estos centros viene dado por la experiencia de primera mano que supone el ir cada finde a uno de ellos. A buen seguro tengo que no hay centro comercial en el cinturón de escoria en el que vives que no hayas pisado, que no te hayas recorrido desde el último sótano del parking hasta la terraza, en el que no hayas pasado una tarde noche y cuyas franquicias de comida de mierda te hayan servido de marco idóneo para una cena en pareja con tu señora.

Tú eres el hermano de semete, el marido silente que va detrás de la mujer, el hombre que espera en la puerta del Monsoon con un montón de bolsas, el que sale a la puerta cada hora a echar un cigarro tras un "te espero fuera", el tío al que la mujer le dice "quédate aquí mientras entro a ver y una cosa y no te vayas a ningún lado", el que recibe miradas de desaprobación si osa abrir la boca ante la enésima visita al Calzedonia, el que no rechista, el que en las reuniones de parejas asiente mientras la mujer relata la visita al centro comercial como si fuera el súmmum de la aventura y todos lo sabemos. Estoy seguro de que te conoces de memoria dónde está el Zara, el Bershka, el Accesorize y el Foster's en cada uno de ellos, que serías capaz de dibujar de memoria los planos de cada centro comercial getafense, mostoleño y alcorconero desde 1998, y que ante cualquiera de sus locales podrías decir "aquí había un Pimkie, luego un Zara, luego un Massimo Dutti", y que el día que tu mujer dice "Hoy vamos al Las Rozas Village" es la cúspide de tus periplos comerciales.
mucho me temo que ese soy yo.

el otro dia en el intimissimi, por lo menos me puse palot, porque estaba la benita preguntando por sujetadores, y la dependienta le dijo que el modelo que llevaba ella era una 100c superpushup que seguramente le iria bien y noseque, mientras se cogia las tetas y se las agitaba parriba.

y yo mientras

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hoy me toca fiesta again...
 
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Bueno Loranca, Parquesur, y Xanadú, son la una trilogía temible de centros comerciales tomados por lo más lumpen de los infraseres, tres estrellas de la muerte, resumidas en la guerra de los payos, el gitano contraataca y el retorno del cale.

Parquesur está perdido, ahora los no marronoides vamos a Plaza Nueva. El otro dia tuve que ir a Parquesur y al salir por fuera para dar el tipico rodeo y no comerte la marabunta de gente resulta que todo el lago estaba lleno de canis caraanchoa style, vaya imagen mas rara.
@tileno, buen raspado le han metido a la sartén de patatas para sacarte ese plato, en serio, parecen las patatas pegadas al fondo con toda la caca reseca en forma de queso y bacon.
 
Y estando abiertos entre semana hasta las 22 horas ¿Cómo coño vais un sábado?




Hace unos días recordé cómo hace años, cuando un hombre acompañaba a su mujer a comprar al súper, la mujer hacia la compra y el hombre se quedaba mirando la sección de electrónica o eligiendo los nuevos tapacubos o fundas de asiento que iba a ponerle al R12.
Esto mientras fumaba, sí jóvenes, en los centros comerciales se podía fumar mientras hacías la compra.
Cuando ella terminaba la compra, pasaba por el pasillo de accesorios de coche y avisaba que ya estaba todo hecho.

Ahora con este rollo de la igualdad, los hombres hacen cola en la pescadería, mientras la zona de accesorios de automóvil se va haciendo cada vez más pequeña proporcionalmente a nuestra hombría.

Luego ya no se podía fumar dentro y entonces la mujer descargaba el carro y el hombre esperaba al final de la caja, en el pasillo ya, con el cigarro en la boca, para volver a cargar el carro. Luego, sin quitarse el Winston de la boca, sacaba la cartera y pagaba en efectivo.
Ahora ellas tienen tarjeta.

Más tarde prohibieron fumar. En ese momento terminó todo aquello y comenzó la era de los centros comerciales que conocemos ahora llenos de gentuza y de tiendas de mierda.



Al poco de morir Franco en el Pryca se podía fumar.
 
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