Un agente de la Policía Local de El Campello ha evitado que un niño de cuatro años se ahogara al atragantarse con el hueso de una oliva, después de aplicar sobre el menor prácticas de primeros auxilios y conseguir que volviera a respirar, ya que estaba sin sentido, «amoratado» y con síntomas de perder la respiración «de forma brusca y repentina». Los hechos se produjeron en una cafetería de la localidad en la que una madre y sus dos hijos acudieron para «recuperarse» del «sobresalto» recibido por un accidente de tráfico «leve» que acababan de sufrir en la zona.