Ni siquiera sale en la prensa local, así que hablemos de futbol.
Joder, qué envidia, hace un año estaba yo por madrid borracho perdido y a punto de ver a mi equipo hacerse con el trofeo, gritando, cantando, bebiendo cerveza, pirpeando a las madrileñas...
Y los del Getafe sentados en su sofá.
Esa final la ganamos horas antes de que se jugara y, aunque el Athletic lo tiene diez veces más jodido que nosotros, las sensaciones que tengo al ver a la gente por aquí son las mismas. Aunque perdáis, que no os convenzan de otra cosa: la ilusión y lo que estáis viviendo ahora no os lo va a quitar nadie. Llegar a una final es un premio, y qué cojones importa que dentro de 20 años nadie se acuerde de quién jugó contra el Barça "del triplete" esta final de Copa. Vosotros lo recordaréis, y recordaréis Valencia y estos días, el aspecto de Mestalla que hoy asiste a su última final, el color de las gradas y el ruido y el olor de la pólvora.