- Registro
- 8 Mar 2004
- Mensajes
- 16.292
- Reacciones
- 3.258
Este hilo pretende dar a conocer los instrumentos musicales, sean modernos o antiguos, de cuerda, viento o percusión. Comenzaremos por uno de creación bastante reciente:
El Mellotrón
Nacido en plena era electrónica, en la década de los 60, el Mellotrón es el precursor del sintetizador, el MIDI y los modernos softwares de creación de música a base de secuencias.
Hoy en día no resulta nada complicado crear música secuenciada usando un software que nos permita ir añadiendo pistas, que sonarán de forma sincronizada y cuyos parámetros podremos modificar. Podremos incluso usar el resultado como fondo para música en directo e introduciendo voces y otros instrumentos, interpretar piezas musicales sin la necesidad de que la banda esté compuesta por una decena de músicos; es más, un solo músico al teclado que además cante y sepa introducir mediante el MIDI las bases rítmicas de cada tema, puede ofrecer un repertorio lo suficientemente digno como para satisfacer al respetable. Pero eso es un privilegio de los tiempos modernos, los que nos ha tocado vivir a nosotros. Y como todo en la vida tiene un origen, los secuenciadores y sintetizadores también tienen el suyo, que es el Mellotrón.
El Mellotrón es un curioso instrumento musical cuyo funcionamiento podríamos describir como electromecánico. Se basaba en la reproducción de cintas electromagnéticas pregrabadas que se seleccionaban mediante un teclado similar al de un piano pero mucho más limitado en octavas. Se componía de dos partes; con la mano izquierda se seleccionaban hasta 18 ritmos diferentes y con la derecha otros 18 instrumentos.
Al pulsar una tecla correspondiente a un instrumento, la cinta magnética asociada se reproducía con una duración de unos 8 segundos; al soltar dicha tecla, un sistema mecánico rebobinaba la cinta para poder ser reproducida de nuevo.
Interior de un Mellotrón mostrando su mecanismo:
Aspecto del panel lateral izquierdo:
Parte trasera del Mellotrón:
Como podemos deducir por su naturaleza mecánica, el Mellotrón adolecía de ciertos defectos que no hacían sencillo su uso en directo, como por ejemplo:
- La respuesta al pulsar una tecla no era instantánea, mostrando un ligero retardo que el intérprete debía saber corregir "entrando un poquito antes".
- El sonido de cada instrumento era bastante "plano", denotándose su artificialidad al carecer de los típicos matices como el arranque de cada nota, o los finales.
- La calidad de los mismos no era tampoco demasiado fiel; no guardaba relación con el excesivo precio que se pagaba por un juego de cintas pregrabadas.
- El instrumento se solía desajustar bastante en los transportes, requiriendo un experto que acompañara al grupo para dejar a punto el instrumento antes de cada actuación.
Aún así, el Mellotrón ofrecía la posibilidad de enriquecer una pieza musical con la adición de un coro de voces, grupo de violines, violas, cellos, etc. sin que dichos músicos existieran realmente. Una auténtica revolución en su época. Su aspecto acabado era tal que este:
Como puede verse, el teclado abarcaba poco más de tres octavas, y con el conjunto de selectores del panel izquierdo se controlaban otros parámetros y se seleccionaban la pista A, B o C de cada cinta. El original se montaba sobre un robusto mueble de madera y se le daba un impecable acabado en blanco.
Numerosos grupos usaron el Mellotron en sus composiciones, desde Los Beatles a Red Hot Chili Peppers (en la actualidad), pasando por The Moody Blues, Yes y demás grupos de rock progresivo y sinfónico.
Rick Wakeman a sus teclados, donde podemos apreciar un par de Mellotrones:
El Mellotrón
Nacido en plena era electrónica, en la década de los 60, el Mellotrón es el precursor del sintetizador, el MIDI y los modernos softwares de creación de música a base de secuencias.


Hoy en día no resulta nada complicado crear música secuenciada usando un software que nos permita ir añadiendo pistas, que sonarán de forma sincronizada y cuyos parámetros podremos modificar. Podremos incluso usar el resultado como fondo para música en directo e introduciendo voces y otros instrumentos, interpretar piezas musicales sin la necesidad de que la banda esté compuesta por una decena de músicos; es más, un solo músico al teclado que además cante y sepa introducir mediante el MIDI las bases rítmicas de cada tema, puede ofrecer un repertorio lo suficientemente digno como para satisfacer al respetable. Pero eso es un privilegio de los tiempos modernos, los que nos ha tocado vivir a nosotros. Y como todo en la vida tiene un origen, los secuenciadores y sintetizadores también tienen el suyo, que es el Mellotrón.
El Mellotrón es un curioso instrumento musical cuyo funcionamiento podríamos describir como electromecánico. Se basaba en la reproducción de cintas electromagnéticas pregrabadas que se seleccionaban mediante un teclado similar al de un piano pero mucho más limitado en octavas. Se componía de dos partes; con la mano izquierda se seleccionaban hasta 18 ritmos diferentes y con la derecha otros 18 instrumentos.
Al pulsar una tecla correspondiente a un instrumento, la cinta magnética asociada se reproducía con una duración de unos 8 segundos; al soltar dicha tecla, un sistema mecánico rebobinaba la cinta para poder ser reproducida de nuevo.
Interior de un Mellotrón mostrando su mecanismo:

Aspecto del panel lateral izquierdo:

Parte trasera del Mellotrón:

Como podemos deducir por su naturaleza mecánica, el Mellotrón adolecía de ciertos defectos que no hacían sencillo su uso en directo, como por ejemplo:
- La respuesta al pulsar una tecla no era instantánea, mostrando un ligero retardo que el intérprete debía saber corregir "entrando un poquito antes".
- El sonido de cada instrumento era bastante "plano", denotándose su artificialidad al carecer de los típicos matices como el arranque de cada nota, o los finales.
- La calidad de los mismos no era tampoco demasiado fiel; no guardaba relación con el excesivo precio que se pagaba por un juego de cintas pregrabadas.
- El instrumento se solía desajustar bastante en los transportes, requiriendo un experto que acompañara al grupo para dejar a punto el instrumento antes de cada actuación.
Aún así, el Mellotrón ofrecía la posibilidad de enriquecer una pieza musical con la adición de un coro de voces, grupo de violines, violas, cellos, etc. sin que dichos músicos existieran realmente. Una auténtica revolución en su época. Su aspecto acabado era tal que este:

Como puede verse, el teclado abarcaba poco más de tres octavas, y con el conjunto de selectores del panel izquierdo se controlaban otros parámetros y se seleccionaban la pista A, B o C de cada cinta. El original se montaba sobre un robusto mueble de madera y se le daba un impecable acabado en blanco.
Numerosos grupos usaron el Mellotron en sus composiciones, desde Los Beatles a Red Hot Chili Peppers (en la actualidad), pasando por The Moody Blues, Yes y demás grupos de rock progresivo y sinfónico.
Rick Wakeman a sus teclados, donde podemos apreciar un par de Mellotrones:
